El presidente de Nueva Esperanza, Gideon Sa’ar, exigió en las negociaciones de la coalición que se le diera la responsabilidad de la presentación de las respuestas del Estado ante el Tribunal Supremo en todas las cuestiones relacionadas con las comunidades de Judea y Samaria.
No se trata de un nuevo acuerdo, sino de la reactivación de un acuerdo que existía en los años en que Ayelet Shaked era ministra de Justicia.
Shaked empleaba a un asesor especial del ministerio para estas peticiones, el Adv. Amir Fischer, y cualquier respuesta del Estado a la petición al Tribunal Supremo que afectara a los asentamientos también pasaba por él y debía obtener su aprobación.
Los líderes de los partidos del “Bloque del Cambio” han llegado esta tarde al hotel Kfar HaMaccabiah de Ramat Gan, con el objetivo de cerrar finalmente los acuerdos que permitan la formación de un gobierno encabezado por Naftali Bennett y Yair Lapid.
Yair Lapid, cuyo mandato del presidente finaliza mañana a medianoche, espera informar al presidente y al presidente de la Knesset antes de las 11:00 horas de mañana de que ha conseguido formar gobierno.
El motivo es el deseo de Lapid y Bennett de jurar el gobierno ya el próximo miércoles y no permitir que el presidente de la Knesset, Yariv Levin, posponga la jura hasta principios de la semana siguiente.
A pesar de ello, los acuerdos entre los distintos partidos aún no se han cerrado, y la intención de anunciar su constitución a las 20:00 horas de esta noche no se ha materializado ante los obstáculos en las negociaciones.
El Canal 12 de noticias informó de que los elementos que participan en las negociaciones acusan al líder de Nueva Esperanza, Ze’ev Elkin, de imponer dificultades a la formación del gobierno al plantear exigencias poco razonables.
El partido Yamina declaró que no tiene intención de renunciar a la exigencia de nombrar a la ministra Ayelet Shaked como miembro del Comité de Selección Judicial, pero aún no se ha alcanzado ningún acuerdo al respecto.