Israel no aceptará la presencia de fuerzas armadas turcas en Gaza dentro del plan estadounidense destinado a poner fin de manera permanente a la guerra en el territorio palestino, afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Gideon Saar.
Saar señaló durante una conferencia de prensa en Budapest que “los países dispuestos a enviar fuerzas armadas deben, como mínimo, actuar con justicia hacia Israel”.
Las relaciones entre Turquía e Israel, antes cercanas, se han deteriorado profundamente. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha criticado con dureza la campaña aérea y terrestre de Israel, comparando sus acciones con las de los nazis y acusando al país de cometer genocidio. Erdogan mantiene un apoyo abierto al grupo terrorista Hamás.
“Turquía, bajo el liderazgo de Erdogan, adoptó una postura hostil hacia Israel, que incluyó declaraciones agresivas y también medidas diplomáticas y económicas”, explicó Saar, acompañado por su homólogo húngaro, Peter Szijjarto. “Por tanto, no resulta razonable permitir que sus fuerzas armadas ingresen en la Franja de Gaza. No estamos de acuerdo con ello y así se lo hemos comunicado a nuestros aliados estadounidenses.”
