Ante el Comité de Asuntos Exteriores y Defensa de la Knéset, Gideon Sa’ar destacó que el retorno de Donald Trump supone grandes oportunidades para Israel. Según sus palabras, 2025 traerá desafíos, pero también posibilidades significativas bajo la nueva administración liderada por el presidente electo.
El ministro aclaró que esto no garantiza consensos absolutos ni la ausencia de debates futuros, pero permite albergar un cierto optimismo respecto a las relaciones bilaterales. “Habrá diferencias, pero también espacio para avanzar en intereses comunes”, puntualizó.
Sa’ar adelantó que en dos meses se llevará a cabo en Bruselas la segunda reunión del Consejo de Asociación con la Unión Europea desde 2012. Subrayó la intención de Israel de iniciar un diálogo constructivo con la UE, destacando el compromiso por fortalecer la cooperación mutua.
Por último, mencionó que su ministerio, tras recibir un importante presupuesto para diplomacia pública, está implementando cambios en la forma en que Israel se proyecta a nivel global. Insistió en que el enfoque debe ser asertivo y no defensivo, resaltando que el país tiene razones suficientes para mantenerse firme en la arena internacional.