El líder de la oposición, Yair Lapid, aprovecha la trágica situación en Israel para obtener réditos políticos.
Después del atentado en el valle del Jordán y la sepultura de Maia y Rina Dee, Lapid criticó duramente al gobierno en una declaración a la prensa.
Críticas a Netanyahu y su gabinete
Lapid se mostró preocupado tras una reunión con el primer ministro Netanyahu, y pidió un ministro de Defensa a tiempo completo. Aprovechó para cuestionar la confianza en el gabinete y la eficacia del foro de seguridad.
Lapid también exigió retirar la jurisdicción del Monte del Templo del ministro Itamar Ben-Gvir y abolir el cargo de Bezalel Smotrich en el Ministerio de Defensa.
Acusaciones de incompetencia gubernamental
El oportunista político acusó al gobierno de ser incompetente y de tener un gabinete en el que nadie confía.
Según Lapid, la principal amenaza para Israel es Irán, pero argumentó que la situación actual no permite abordarla correctamente, ya que Israel está perdiendo apoyo internacional y disuasión.
Recordando un pasado idealizado
Lapid afirmó que hace 100 días, entregaron un país seguro y próspero, con una situación calmada en Gaza, Judea y Samaria, y Jerusalén.
En lugar de proponer soluciones constructivas, Lapid atribuye la responsabilidad de los problemas actuales a los líderes del gobierno.
Respuesta del Likud a las críticas de Lapid
El Likud lamentó que Lapid optara por jugar a la política mezquina en lugar de transmitir un mensaje de unidad contra los enemigos de Israel. El partido recordó la capitulación de Lapid ante Hezbolá y la narrativa de Hamás respecto al Monte del Templo, que ha dejado un difícil legado para enfrentar.
Responsabilidad nacional en tiempos de crisis
En momentos de crisis, se espera que los líderes políticos muestren responsabilidad y unidad nacional.
Sin embargo, el oportunista Yair Lapid parece más interesado en atacar al gobierno y sacar provecho de la situación que en abordar constructivamente los desafíos que enfrenta Israel.