El MK Yuli Edelstein (Likud) arremetió el domingo contra el primer ministro Naftali Bennett, quien durante una conferencia de prensa con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se refirió a los territorios de Judea y Samaria como “Cisjordania”.
“Naftali, cuando hablas en inglés y en el extranjero, tus palabras tienen peso. No es como decir que eres de derechas y luego sentarte con el Movimiento Islámico, Lapid y Meretz”, dijo Edelstein.
Y añadió: “Cuando llamas a los territorios de Judea y Samaria utilizando la terminología y la narrativa palestina – tiene un significado político. Una y otra vez demuestran que esto les queda grande”.
El presidente del Partido Sionista Religioso, MK Bezalel Smotrich, fue aún más duro con sus críticas a Bennett. “Es hora de que todos nos demos cuenta, cada día está más claro que Bennett y Shaked se unieron a la izquierda no como un movimiento táctico, sino como una adopción total de la política e incluso la terminología de la izquierda. Esto se refleja en la pérdida de gobernabilidad en el Néguev, en la destrucción sistemática de los asentamientos, en la congelación de la construcción, en la pérdida de disuasión frente al terrorismo, en el daño a la identidad judía del Estado, y más y más.”
“Cada día son más los que se despejan y comprenden que han sido engañados por los falsos encantos de la derecha de Yamina y las encuestas en las que ésta apenas roza el umbral electoral así lo demuestran”, dijo Smotrich.
El portavoz del primer ministro, Matan Sidi, respondió a las críticas en una conversación con Israel National News y dijo: “Normalmente el primer ministro utiliza el término ‘Judea y Samaria’, tanto en hebreo como en inglés. Esta es una declaración casual, y no hay que atribuirle ningún significado especial”.
MK Yomtob Kalfon (Yamina) explicó: “El término ‘Cisjordania’ es habitual y, por desgracia, Netanyahu y otros primeros ministros lo han utilizado muchas veces. En mis conversaciones en hebreo con el primer ministro, el término común, siempre, es Judea y Samaria. En mi opinión, es un ataque excesivo y político”.