Un soldado israelí ha sido condenado a tres años de prisión por disparar y matar accidentalmente a un compañero. La sentencia se alcanzó mediante un acuerdo de culpabilidad, considerada inusualmente severa en casos similares.
Sentencia inusual en un incidente de fuego amigo
El soldado Binyamin Pentiyahu, de 19 años, fue declarado culpable de causar la muerte por imprudencia a su camarada Baruch Kabarta, también de 19 años, en un evento ocurrido en enero de 2023. La condena representa un aumento en la severidad en comparación con casos anteriores de fuego amigo, donde se ha llegado a cumplir solamente dos años de prisión.
El incidente tuvo lugar en la base de Anatot, cerca de Jerusalén, y fue seguido por una investigación exhaustiva que descubrió varios errores en la unidad y su liderazgo. El acuerdo de culpabilidad requería aprobación por parte del tribunal militar, lo que añade un elemento diferenciador en este caso.
Kabarta, originario de Petah Tikva y miembro del Batallón Erez de la Policía Militar, fue herido de muerte en la base, lo que desencadenó una investigación detallada y el posterior acuerdo judicial.
Respuestas y medidas adicionales tras el incidente
La comisión de investigación no sólo enfocó sus esfuerzos en el incidente específico, sino también en la conducta general de la unidad y sus comandantes. Se detectaron errores en la gestión, pero no se encontró responsabilidad directa en los mandos del batallón.
Por recomendación del jefe de la Dirección de Recursos Humanos, general Yaniv Asur, se decidieron diversas medidas de mando y tanto el comandante del batallón como su adjunto fueron amonestados. Además, el Jefe del Estado Mayor enfatizó la importancia de aplicar las lecciones aprendidas y llevar a cabo esfuerzos en todas las unidades de las FDI.
La sentencia, aunque inusual en su duración, responde a un compromiso de Israel con la aplicación rigurosa de sus leyes militares y la expectativa de responsabilidad y conducta dentro de sus fuerzas armadas.