Un helicóptero Sikorsky CH-53 Yasur, que transportaba tropas israelíes, fue impactado por un proyectil en un ataque perpetrado por Hamás. A pesar de los severos daños, no hubo bajas entre los soldados.
En un preocupante desarrollo durante el reciente asalto de Hamás, un helicóptero Sikorsky CH-53 Yasur, que llevaba a bordo a soldados de la Brigada Paracaidista de Israel, sufrió un ataque el pasado sábado. A pesar de ser alcanzado por un artefacto explosivo lanzado por terroristas, los informes confirman que todos los efectivos militares a bordo resultaron ilesos.
El incidente se mantuvo bajo estricta confidencialidad hasta que las autoridades militares permitieron su divulgación. Las primeras informaciones indican que, aunque el aparato logró aterrizar de emergencia, permitiendo el desembarco seguro de la tripulación, sufrió daños considerables. Fotografías del suceso muestran la aeronave consumida en gran parte por el fuego, con escasas secciones aún identificables.
Las fuentes permanecen divididas respecto al tipo de munición utilizada en el ataque. Mientras que el portal Ynet sugiere que se trató de un misil antitanque, el Canal 13 apunta hacia una granada propulsada por cohete. Independientemente del artefacto empleado, la rápida reacción de los pilotos no solo salvó vidas, sino que también permitió continuar con la movilización de tropas hacia la conflictiva frontera con Gaza empleando otro helicóptero.
Este ataque se produce en un contexto de escalada significativa de violencia desde el 7 de octubre, caracterizado por una incursión devastadora en la que más de 1.300 personas fueron asesinadas, la mayoría civiles, y donde entre 150 y 200 fueron secuestradas por miembros del grupo terrorista Hamás. Estos eventos desencadenaron una respuesta inmediata de Israel, que declaró la guerra al grupo terrorista y emprendió una serie de ataques aéreos en la Franja de Gaza, enfocados en desmantelar la infraestructura terrorista.
En respuesta a las acciones de Hamás, las fuerzas israelíes han eliminado aproximadamente a 1.500 terroristas que lograron infiltrarse en el país, además de capturar a un número aún no confirmado. El Ministerio de Sanidad en Gaza, bajo control de Hamás, reporta que los contraataques han dado como resultado 2.329 palestinos fallecidos y otros 9.042 heridos.
Este acontecimiento subraya la volátil situación en la región, donde la dinámica de ataque-represalia continúa intensificándose. Mientras tanto, Israel mantiene su firmeza en la defensa de su integridad territorial y la seguridad de su gente frente a las agresiones de Hamás.