En las últimas 24 horas, Israel reporta haber atacado alrededor de 40 ubicaciones relacionadas con Hamás en Gaza, incluidos puntos de concentración de terroristas y centros de comando.
Según el ejército israelí, los bombardeos se llevaron a cabo en una operación conjunta entre la Fuerza Aérea y el Comando Sur, basándose en información proporcionada por Inteligencia Militar y la agencia Shin Bet.
De acuerdo con las FDI, las zonas impactadas albergaban a decenas de miembros de Hamás que organizaban y ejecutaban ataques contra soldados israelíes y objetivos en territorio israelí.
Parte de los objetivos atacados funcionaban previamente como escuelas, que también servían de refugio para desplazados palestinos. Las FDI sostienen que este uso de infraestructuras civiles con fines bélicos es una táctica recurrente de Hamás.
El ejército asegura haber tomado medidas para reducir el riesgo para los civiles durante los ataques, utilizando armamento de precisión, monitoreo aéreo constante y datos de inteligencia adicionales.