En los últimos días, Israel ha intensificado significativamente sus ataques aéreos con el objetivo de “cambiar el equilibrio de poder en el norte destruyendo miles de cohetes, eliminando las capacidades [de Hezbolá] y mediante otros métodos”, según declaró un funcionario israelí al medio The Times of Israel.
El inicio de estos ataques estuvo marcado por informes que mencionaban “varias explosiones de beepers y otros dispositivos en todo el Líbano”, comentó el funcionario, aunque Israel no ha confirmado su implicación directa.
“Posteriormente, se produjo el asesinato de Ibrahim Aqil y de los líderes de Radwan. Y en los últimos dos días, el fuego masivo se ha intensificado con el propósito de golpear con fuerza a Hezbolá”, añadió.
El funcionario detalló que Israel persigue dos objetivos principales: el primero es “reforzar la disuasión contra Hezbolá y crear las condiciones para que los residentes puedan regresar a sus hogares”.
El segundo objetivo es disuadir a “todo el eje iraní”, explicó el funcionario.
Israel está dispuesto a detener sus operaciones si Hezbolá accede a sus exigencias, principalmente la retirada de la frontera norte de Israel, señaló el funcionario, agregando que “ellos conocen nuestras exigencias”.
Sin embargo, advirtió que si Hezbolá no cesa sus acciones, “vendrá la siguiente etapa”, sin especificar en qué consistirá. No obstante, el funcionario aclaró que esto no implicaría necesariamente una invasión terrestre, subrayando que “o dejan de disparar o no podrán hacerlo más”.