Israel intensifica ofensiva contra Hamás, busca controlar 75% de Gaza en dos meses y destruir infraestructura terrorista.
Estrategia militar de Israel para derrotar a Hamás en Gaza
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron el domingo un ambicioso plan para ocupar el 75% del territorio de la Franja de Gaza en un plazo de dos meses, como parte de una ofensiva renovada contra el grupo terrorista Hamás. Este objetivo busca desmantelar la infraestructura militar y civil de la organización, que ha controlado Gaza desde 2007. La operación, que incluye una inminente ofensiva terrestre a gran escala, responde a la negativa de Hamás de liberar a los 58 rehenes que aún retiene, de los cuales se estima que solo 20 están vivos, según datos militares.
El 18 de marzo, Israel rompió un alto el fuego de dos meses con una serie de ataques aéreos sorpresa contra objetivos de Hamás, marcando el inicio de una nueva fase en la guerra. Desde entonces, las FDI han desplegado cinco divisiones, equivalentes a decenas de miles de soldados, en la Franja. Actualmente, los militares controlan el 40% del territorio gazatí, pero planean expandir su dominio al 75% en las próximas semanas, según documentos obtenidos por The Times of Israel. La estrategia incluye capturar, despejar y mantener áreas clave como Rafah, Jan Yunis y las ciudades al norte de la ciudad de Gaza.
La población de Gaza, estimada en 2 millones de personas, será desplazada a tres zonas reducidas que representan solo el 25% de la Franja. Estas áreas son: Mawasi, una zona costera en el sur declarada previamente como humanitaria, que alberga a unos 700.000 palestinos; una franja en Deir al-Balah y Nuseirat, en el centro, con entre 300.000 y 350.000 residentes; y el centro de la ciudad de Gaza, con cerca de 1 millón de personas. Esta reubicación busca facilitar las operaciones terrestres de las FDI, que planean arrasar la mayoría de los edificios en las zonas ocupadas y destruir la infraestructura de Hamás.
El enfoque militar ha cambiado. Anteriormente, las FDI priorizaban eliminar a operativos terroristas, pero ahora se centran en capturar territorio y destruir los 900 kilómetros de túneles construidos por Hamás, de los cuales solo el 25% han sido destruidos. Los militares han identificado que los túneles de ataque, centros de comando y fabricación de armas son los objetivos principales, mientras que los túneles de movilidad interna de Hamás son secundarios. Este cambio estratégico busca debilitar la capacidad operativa del grupo terrorista y su control sobre la población.
Datos clave sobre la ofensiva de las FDI en Gaza
- Control territorial: Las FDI controlan actualmente el 40% de Gaza y planean alcanzar el 75% en dos meses.
- Túneles de Hamás: Existen 900 km de túneles; solo el 25% han sido destruidos, con foco en túneles de ataque y comando.
- Rehenes: Hamás retiene 58 rehenes, de los cuales se cree que solo 20 están vivos, según estimaciones militares.
- Bajas confirmadas: Desde el 18 de marzo, las FDI han eliminado a 800 operativos terroristas, incluyendo 50 altos mandos.
- Ayuda humanitaria: Un nuevo sistema de distribución operado por una empresa estadounidense comenzará el lunes en cuatro centros.
Nuevo mecanismo de ayuda humanitaria en Gaza
Un nuevo sistema de distribución de ayuda humanitaria comenzará a operar el lunes, gestionado por una empresa privada de seguridad estadounidense y supervisado por las FDI. Este mecanismo busca evitar que Hamás capture los suministros, como ocurrió antes del colapso del alto el fuego el 2 de marzo. Las FDI han establecido cuatro centros de distribución: tres en Rafah, que atenderán a Mawasi y posiblemente al centro de Gaza, y uno en el corredor de Netzarim, para la ciudad de Gaza y áreas cercanas. Cada centro podrá abastecer a 300.000 personas por semana, entregando alimentos para cinco días por familia.
Antes de la interrupción de la ayuda, Hamás desviaba gran parte de los suministros para financiar sus operaciones, venderlos a precios elevados o pagar salarios a sus miembros. Desde que Israel detuvo los envíos el 2 de marzo, el grupo terrorista ha enfrentado dificultades para mantener sus finanzas, según las FDI. Los camiones de ayuda seguirán transportando suministros esenciales, como harina para panaderías y equipos para hospitales, pero bajo el nuevo sistema de distribución.
El jefe del Estado Mayor de las FDI, teniente general Eyal Zamir, visitó Jan Yunis el domingo junto al jefe del Comando Sur, mayor general Yaniv Asor. Zamir afirmó que los combates contra Hamás “no son una guerra interminable” y destacó que el grupo terrorista está bajo “tremenda presión”, habiendo perdido la mayoría de sus activos y su capacidad de mando. “Estamos intensificando nuestra actividad de acuerdo con el plan ordenado”, dijo Zamir, según un comunicado militar.
Desde la reanudación de los combates, las FDI han atacado más de 2.900 objetivos en Gaza, eliminando a 800 operativos terroristas, incluidos 50 altos funcionarios y más de una docena de participantes en el ataque del 7 de octubre. Las cifras se basan en muertes confirmadas con nombre y número de identificación, aunque el ejército estima que el número real es mayor.
Impacto de la guerra y respuesta de Hamás
Hamás ha reportado que 3.785 palestinos han muerto desde el 18 de marzo, aunque esta cifra no distingue entre civiles y combatientes y no ha sido verificada de forma independiente. Por su parte, las FDI sostienen que la proporción de bajas civiles respecto a terroristas se ha mantenido constante, con aproximadamente dos o tres civiles por cada operativo de Hamás muerto. El ejército resalta que Hamás utiliza a la población como escudos humanos, operando desde áreas civiles como hospitales, escuelas y mezquitas, lo que complica las operaciones militares.
El Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás, afirma que más de 53.000 personas han muerto o se presume muertas en la guerra hasta la fecha. En contraste, Israel reporta haber eliminado a unos 20.000 combatientes en Gaza hasta enero, además de 1.600 terroristas dentro de Israel durante el ataque del 7 de octubre. Las FDI aseguran que no han modificado sus políticas de ataques aéreos ni los niveles aceptables de daños colaterales, y continúan trabajando para minimizar las víctimas civiles.
A pesar de los avances militares, los funcionarios políticos israelíes no han definido un plan claro para la gobernanza de Gaza tras la derrota de Hamás. La ausencia de discusiones sobre el “día después” plantea interrogantes sobre el futuro político y administrativo de la Franja, mientras las FDI se concentran en desmantelar la estructura operativa del grupo terrorista.