Hezbolá ha identificado al muerto como Hassan Fares Jeshi, afirmando que murió “en el camino a Jerusalén”, una expresión que utilizan para referirse a sus operativos muertos en ataques israelíes.
Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) habían informado previamente que Jeshi fue abatido en un ataque con drones en Jouaiyya. Según las FDI, Jeshi era un comandante implicado en el lanzamiento de misiles antitanque guiados dirigidos contra el norte de Israel.