El sábado, Hezbolá disparó más de 40 cohetes hacia Israel, según informaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), en medio de continuos enfrentamientos transfronterizos con el grupo terrorista libanés.
Por la tarde, ocho cohetes fueron disparados hacia el centro de Galilea. Uno de estos impactó en la zona de Even Menachem, mientras que el resto de los proyectiles fueron interceptados o cayeron en zonas abiertas. Afortunadamente, no se registraron víctimas a raíz de este ataque.
Las sirenas de alerta sonaron en Tel Aviv y sus alrededores durante la tarde, generando alarma sobre un posible ataque con drones. Sin embargo, los militares israelíes confirmaron más tarde que se trataba de falsas alarmas.
En las primeras horas de la tarde, 25 cohetes fueron lanzados hacia la zona de Galilea y la bahía de Haifa. Según las FDI, varios de estos cohetes fueron interceptados, mientras que el resto cayeron en áreas sin víctimas. En la mañana, cinco cohetes adicionales fueron disparados hacia la misma región, con el mismo resultado.
Durante la tarde, cinco cohetes más fueron lanzados hacia la Galilea Occidental, todos los cuales fueron interceptados o cayeron en zonas abiertas.
Por la noche, las FDI interceptaron un dron lanzado desde Irak, atribuido al grupo terrorista respaldado por Irán, Resistencia Islámica. El dron fue derribado antes de cruzar el espacio aéreo israelí, aunque provocó que las sirenas sonaran en varias ciudades del sur de los Altos del Golán.
Además, otro dron lanzado desde el Líbano fue interceptado durante la misma noche en la región de Galilea Occidental, lo que nuevamente activó las sirenas en esa zona.
Ataques aéreos israelíes golpean infraestructuras de Hezbolá
La noche del sábado, aviones de combate israelíes atacaron varias salas de mando de Hezbolá, sitios de fabricación de armas y otras infraestructuras en los suburbios del sur de Beirut, según informaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Las autoridades israelíes señalaron que estos objetivos estaban situados “en el corazón de una población civil”.
Antes de los ataques, los militares israelíes emitieron advertencias de evacuación para los civiles en la zona, acusando a Hezbolá de utilizar a la población local como escudos humanos.
En Siria, varios soldados resultaron heridos en un ataque aéreo israelí en las zonas de Alepo e Idlib, según informó la agencia de noticias estatal siria SANA. Sin embargo, las FDI no hicieron comentarios sobre este incidente.
Por otro lado, el número de víctimas mortales por los ataques aéreos israelíes en la ciudad de Tiro, en el sur del Líbano, aumentó el viernes a siete personas, incluyendo dos niñas, según el Ministerio de Salud del Líbano.
El mismo ministerio indicó que 46 personas resultaron heridas, y que los rescatistas aún buscaban personas desaparecidas bajo los escombros. Además, se hallaron partes de cuerpos, que serán identificadas mediante pruebas de ADN.
Las FDI afirmaron que durante sus ataques destruyeron varias salas de mando de Hezbolá, en las que se encontraban operativos del grupo terrorista.
FDI completan operación en el Monte Dov y Shebaa
Esta semana, la Unidad de reserva de élite Alpinista de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), bajo la 810ª Brigada Regional “Montañas”, concluyó una operación de una semana en el lado libanés del Monte Dov y en las afueras de la ciudad de Shebaa, según reportaron las FDI.
Durante la operación, los reservistas israelíes localizaron varios túneles, lanzacohetes y depósitos de armas utilizados por Hezbolá en la región.
Desde el 8 de octubre, las fuerzas de Hezbolá han estado atacando comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera de manera casi diaria. El grupo terrorista ha explicado que sus ataques buscan apoyar a Gaza en el contexto de la guerra en ese territorio.
Tras el ataque de Hamás el 7 de octubre, unos 60.000 residentes de las ciudades del norte de Israel, cercanas a la frontera con el Líbano, fueron evacuados. La evacuación se produjo por temores de un ataque similar por parte de Hezbolá, además de la creciente amenaza de cohetes y misiles lanzados por el grupo terrorista.
Desde octubre de 2023, los ataques contra el norte de Israel han dejado 41 civiles muertos, mientras que 62 soldados y reservistas de las FDI han muerto en escaramuzas transfronterizas y en la operación terrestre iniciada en el sur del Líbano a finales de septiembre. Asimismo, dos soldados israelíes han muerto en un ataque con drones procedentes de Irak, y ha habido varios ataques desde Siria sin víctimas mortales.
Las FDI estiman que alrededor de 3.000 miembros de Hezbolá han perdido la vida en la guerra. Además, se ha informado sobre la muerte de unos 100 miembros de otros grupos terroristas, junto con cientos de civiles en Líbano.
Hezbolá, por su parte, ha confirmado la muerte de 516 de sus miembros a manos de Israel durante los combates, la mayoría en Líbano, pero también algunos en Siria. Estas cifras no se han actualizado de forma sistemática desde el inicio de la nueva ofensiva israelí contra el grupo terrorista en septiembre.