Un reservista de las Fuerzas de Defensa de Israel murió en un enfrentamiento en el norte de la Franja de Gaza, informó el ejército este domingo. Al mismo tiempo, autoridades controladas por Hamás en el enclave palestino señalaron que un ataque aéreo sobre un edificio dejó decenas de víctimas, entre muertos y heridos.
El soldado caído, identificado como el sargento de primera clase (reservado) Idan Keinan, de 21 años y perteneciente al Batallón Nahshon de la Brigada Kfir, residía en Ramat Gan. Según una investigación preliminar del ejército, Keinan fue abatido el sábado en Beit Lahiya por disparos de francotiradores.
Con esta muerte, la cifra de soldados israelíes muertos durante la ofensiva terrestre contra Hamás y las operaciones en la frontera asciende a 376. El entierro de Keinan tendrá lugar a las 4 p.m. en el cementerio Kiryat Shaul. A Keinan le sobreviven sus padres, una hermana y un hermano.
Por su parte, Linoy, hermana del soldado, expresó en redes sociales: “Murió como un héroe”. En su mensaje, agregó: “¿Cómo te han arrebatado de nosotros? Nunca podré superar una pérdida como la tuya”.
En otra publicación, Linoy compartió un mensaje que su hermano había enviado dos meses atrás a su abuela. En este, Keinan escribió: “Si el Padre Celestial decide que alguien debe morir por nuestro pueblo, es el mayor mérito del mundo”. Además, señaló que comprendía los peligros y las posibles consecuencias de su elección: “Estoy en paz con eso y, más que eso, este es el camino que elegí y creo que todo hombre en el país debería elegirlo”.
La guerra actual tuvo su inicio el 7 de octubre de 2023, cuando Hamás lideró un ataque transfronterizo que dejó 1.200 muertos en Israel, en su mayoría civiles. Durante la incursión, miles de terroristas ingresaron al sur del país, secuestrando a 251 personas y llevándolas a Gaza. Hasta el momento, 97 de esos rehenes continúan en cautiverio, junto con otras cuatro personas que llevan más de una década retenidas.
Decenas de islamistas eliminados en intensos combates
Las Fuerzas de Defensa de Israel continúan sus operaciones en Jabaliya y Beit Lahiya, zonas del norte de Gaza que han sido blanco de intensas ofensivas desde principios de octubre, según informó el ejército durante el fin de semana. Médicos locales reportaron que un ataque israelí en un edificio residencial de varios pisos en Beit Lahiya dejó decenas de muertos y heridos el domingo.
Horas antes, otro ataque aéreo en el campamento de Bureij, en el centro de la Franja de Gaza, causó la muerte de al menos 10 personas tras el impacto de un misil en una casa, según médicos de la región. Las autoridades de Gaza, bajo el control de Hamás, no diferencian entre combatientes y civiles en sus reportes. Hasta el momento, el ejército israelí no ha emitido comentarios al respecto.
En un esfuerzo por combatir a los terroristas de Hamás, las FDI desplegaron tanques el mes pasado en Beit Lahiya, Beit Janún y Jabaliya, el campo de refugiados más grande de Gaza. Israel afirma haber eliminado a cientos de hombres armados en estas áreas, que, según residentes, han quedado aisladas de la ciudad de Gaza debido a la presencia militar.
Por otro lado, una fuente de Hamás declaró al medio qatarí Al-Araby al-Jadeed que no ha habido comunicación con los comandantes responsables de los rehenes desde hace aproximadamente un mes. La misma fuente afirmó que los rehenes representan un activo clave en las negociaciones de Hamás, y que su única esperanza de sobrevivir es alcanzar un acuerdo para su liberación que incluya un alto el fuego.
Además, Hamás rechazó las acusaciones de que los líderes políticos del grupo ya no controlan a los combatientes en Gaza. Según la fuente, las decisiones están siendo coordinadas en varios niveles y los combatientes de las Brigadas Qassam han jurado lealtad a la nueva dirección de Hamás basada en Qatar. Este liderazgo fue establecido tras la muerte de Yahya Sinwar, antiguo jefe del grupo en Gaza, quien fue abatido por Israel el mes pasado.
Finalmente, Hamás habría iniciado una nueva campaña de reclutamiento de combatientes, la segunda desde el inicio de la guerra. Según la misma fuente, el grupo ha evitado proporcionar información sobre los rehenes, especialmente los ciudadanos estadounidenses, debido a que Estados Unidos no ha ofrecido garantías sobre el cese de los combates. Washington ha intensificado la presión sobre los mediadores para avanzar en las negociaciones.
97 rehenes siguen cautivos un año después del ataque de Hamás
Un año después de los ataques del 7 de octubre de 2023, 97 rehenes continúan cautivos en Gaza, según información de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Entre ellos, se incluyen los cuerpos de al menos 34 personas, cuya muerte ya ha sido confirmada.
Durante los últimos 12 meses, las FDI lograron liberar a 109 rehenes, rescatar con vida a ocho y recuperar los cadáveres de otros 37. Israel también busca repatriar a dos civiles que cruzaron a Gaza hace una década, junto con los restos de dos soldados muertos durante la guerra de 2014.
Protestas realizadas el domingo en diversos puntos del país exigieron al gobierno llegar a un acuerdo para asegurar la liberación de los rehenes. Sin embargo, las negociaciones mediadas por Egipto y Hamás no han mostrado avances significativos. Un acuerdo permitiría la liberación de rehenes a cambio de un alto el fuego y la excarcelación de cientos de terroristas palestinos presos actualmente detenidos por Israel.
El Ministerio de Salud de Gaza, bajo control de Hamás, asegura que más de 42.000 personas han muerto o están desaparecidas como resultado de los combates en la Franja. Estas cifras, no verificadas, incluyen tanto a civiles como a combatientes, según los informes. Por su parte, Israel declara haber abatido a unos 18.000 combatientes hasta noviembre, además de otros 1.000 terroristas que participaron en los ataques dentro de su territorio el 7 de octubre.
Israel ha reiterado que intenta minimizar las bajas civiles y acusa a Hamás de usar a la población de Gaza como escudos humanos. Los terroristas operan desde zonas civiles como viviendas, hospitales, escuelas y mezquitas, lo que dificulta los esfuerzos militares y humanitarios.