El líder histórico de Hezbolá, Hassan Nasrallah, junto con otros altos comandantes del grupo terrorista, murieron tras un masivo ataque aéreo israelí contra su cuartel subterráneo en Beirut, según informaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) el sábado por la mañana. Esta ofensiva se produce en el contexto de un esfuerzo por parte de Israel para poner fin de forma decisiva al conflicto que lleva ya un año.
El anuncio coincidió con la intensificación de los ataques aéreos israelíes contra infraestructuras de Hezbolá en Beirut y otras partes del Líbano. Horas antes del ataque, Nasrallah había sido alcanzado en la sede principal del grupo, dejando a Dahiyeh, suburbio del sur de Beirut y bastión de Hezbolá, cubierto de humo y polvo.
Durante las últimas semanas, Israel ha neutralizado a una parte significativa de la cúpula de Hezbolá. Según el comunicado de las FDI, además de Nasrallah, el comandante del Frente Sur de Hezbolá, Ali Karaki, murió en el ataque del viernes, junto con otros altos mandos del grupo terrorista. Karaki había sobrevivido recientemente a un intento de asesinato.
Nasrallah fue objetivo de docenas de bombas antibúnkeres lanzadas por aviones de combate israelíes mientras se encontraba en la sede principal de Hezbolá, localizada bajo edificios residenciales en Dahiyeh. La operación, denominada “Nuevo Orden”, fue llevada a cabo mientras los altos dirigentes del grupo coordinaban actividades terroristas contra Israel, según informaron las FDI.
A pesar de la noticia del ataque, Hezbolá no ha confirmado oficialmente las muertes. Sin embargo, una fuente cercana al grupo afirmó a la agencia AFP que se había “perdido contacto” con Nasrallah desde la noche del viernes. “Desde el viernes por la noche se perdió el contacto con Sayyed Hassan Nasrallah”, dijo la fuente, que prefirió mantenerse en el anonimato debido a la delicadeza del asunto.
En respuesta al ataque, Hezbolá reanudó el lanzamiento de cohetes hacia el norte de Israel y lanzó un misil balístico hacia Tel Aviv, además de cohetes de largo alcance dirigidos a Judea y Samaria.
El jefe del Estado Mayor de las FDI, el teniente general Herzi Halevi, declaró tras el ataque que Israel perseguiría a cualquiera que representara una amenaza para el país y sus ciudadanos. “Las herramientas que tenemos a nuestra disposición no se acaban. El mensaje es simple: sabremos cómo llegar a cualquiera que amenace a los ciudadanos del Estado de Israel”, expresó.
Hassan Nasrallah asumió el liderazgo de Hezbolá en 1992 a la edad de 35 años, convirtiéndose en el rostro público del grupo fundado por la Guardia Revolucionaria de Irán en 1982 para luchar contra Israel. Durante el último año, su influencia ha sido evidente en la guerra que se desarrolló a raíz de la guerra en Gaza. Hezbolá se sumó a la contienda lanzando cohetes desde el sur del Líbano en apoyo a su aliado Hamás.
Hezbolá comenzó a disparar cohetes contra Israel el 8 de octubre, un día después de la masacre perpetrada por Hamás en el sur de Israel, que dejó 1.200 muertos y 251 rehenes.