Unos 20 cohetes fueron disparados a las bases militares israelíes por las fuerzas iraníes desde el sur de Siria, poco después de la medianoche del jueves, desencadenando el mayor choque directo entre Jerusalén y Teherán, con aviones israelíes dirigidos a numerosos sitios controlados por Irán en toda Siria.
El ejército israelí dijo que el bombardeo inicial de misiles fue llevado a cabo por miembros de las Fuerzas Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní. Esta parece ser la primera vez que Israel atribuye un ataque directamente a Irán, que generalmente opera a través de proxys.
Algunos de los misiles entrantes fueron interceptados por el sistema de defensa de Cúpula de Hierro, dijo el ejército. No hubo informes de bajas israelíes en el ataque. Un portavoz de las FDI dijo que un daño mínimo fue causado a las bases militares israelíes, pero que era “limitado”.
En respuesta, Israel lanzó una extensa campaña de represalia, golpeando bases iraníes en toda Siria durante horas después del bombardeo iraní inicial, dijo un portavoz militar israelí, advirtiendo al dictador sirio Bashar Assad que no se involucrara.
“Las Fuerzas de Defensa de Israel están tomando medidas en este momento contra objetivos iraníes en Siria. Cualquier participación siria contra este movimiento será atendida con la mayor seriedad”, escribió Avichay Adraee, portavoz en árabe del ejército israelí, en Twitter.
Según informes de la prensa árabe, la Fuerza Aérea israelí atacó numerosos objetivos en Damasco y sus alrededores, incluido el campo aéreo militar Mezzeh, que según se informa es la sede de la élite de la guardia republicana de Assad. También se informó de un gran ataque aéreo cerca de la ciudad de Qusayr, al noroeste de Siria, cerca de la frontera libanesa, un conocido bastión de Hezbolá.
La agencia de noticias estatal de Siria, después de informar inicialmente que las defensas aéreas del país interceptaban docenas de “misiles israelíes hostiles”, dijo luego que los aviones israelíes “apuntaban a destruir las defensas antiaéreas y el radar”.
En los días y semanas previos al bombardeo iraní, los oficiales de defensa advirtieron reiteradamente que Israel respondería agresivamente a cualquier ataque desde Siria.