El domingo, los jefes de seguridad lanzaron una “severa advertencia” al gabinete israelí sobre la necesidad de evitar un nuevo frente en Judea y Samaria, ante el creciente aumento de la actividad terrorista en la zona, según informaron los medios hebreos el lunes.
De acuerdo con un informe del Canal 12, el servicio de seguridad Shin Bet está particularmente preocupado por el posible retorno de los atentados suicidas. El informe detalla que el ministro de Defensa, Yoav Gallant, el jefe del Shin Bet, Ronen Bar, y el comandante de las Fuerzas de Defensa de Israel, el teniente general Herzi Halevi, propusieron una serie de medidas para frenar el terrorismo palestino en Judea y Samaria.
Entre las recomendaciones se incluyen la ampliación de las celdas en las prisiones, el fortalecimiento de las unidades encubiertas para realizar arrestos, y la implementación de medidas más estrictas contra la entrada ilegal a Israel. También sugirieron aumentar la vigilancia tecnológica en carreteras y cruces, así como construir un muro en la frontera con Jordania, que ha visto un aumento en la actividad terrorista recientemente.
Los altos funcionarios recomendaron además un plan del Shin Bet para permitir la entrada de trabajadores palestinos a Israel, con el objetivo de aliviar las dificultades económicas en la región, y mantener estrictamente el status quo en el Monte del Templo en Jerusalén, donde los judíos pueden visitar, pero no realizar oraciones.
Esta última propuesta parece estar orientada a mejorar las relaciones con la monarquía jordana, custodio del sitio sagrado, en reconocimiento a la ayuda de Ammán para desarticular células terroristas. Tras la reunión, el primer ministro Benjamin Netanyahu confirmó que el status quo no ha cambiado e instruyó a sus ministros a solicitar su autorización antes de visitar el lugar. Según el Canal 12, la declaración fue una garantía explícita a Jordania.
La frontera con Jordania, en gran parte adyacente a Judea y Samaria, es la más extensa y vulnerable de Israel. Según informes, células apoyadas por Irán han utilizado esta ruta para contrabandear armas hacia Judea y Samaria, en un intento reciente de perjudicar el esfuerzo militar israelí en Gaza.
El Canal 12, citando a tres ministros presentes en la reunión, informó que los altos cargos de seguridad advirtieron al gabinete sobre el riesgo de que la situación en Judea y Samaria se descontrole. “Lo que ocurre en Judea y Samaria podría explotar y afectarnos a todos”, habrían señalado. Añadieron que la posible reubicación de tropas hacia esa zona se haría desde Gaza, lo que podría comprometer los objetivos bélicos del gabinete debido a la escasez de personal.
El domingo, un ciudadano jordano abrió fuego en el cruce fronterizo del Puente Allenby, entre Jordania y Judea y Samaria, matando a tres civiles israelíes, un día después de que las FDI concluyeran una operación antiterrorista de diez días en el norte del territorio.
El Canal 12 informó que seis semanas antes, la inteligencia jordana frustró un complot de cuatro jordanos para detonar explosivos en un camión en el mismo cruce. La célula fue arrestada en Salt, al oeste de Ammán, y los terroristas llevaron a las autoridades a un laboratorio donde se hallaron varios dispositivos explosivos. Los presuntos implicados no pertenecían a la minoría palestina de Jordania, y la célula parecía haberse formado localmente, sin vínculos con Irán, Hezbolá o fuerzas externas.
El informe también reveló que Jordania desmanteló al menos tres células terroristas en los últimos dos meses, reclutadas por Hezbolá a través de Internet, con la intención de desestabilizar el reino. En junio, las fuerzas de seguridad jordanas encontraron y destruyeron explosivos ocultos en un almacén en las afueras de Ammán, parte de un complot atribuido a Irán para generar inestabilidad en el país.
Con la autorización de Netanyahu, altos funcionarios israelíes aseguraron a la Corte Real Hachemita en Jordania que el status quo en el Monte del Templo en Jerusalén se mantendría inalterado, de acuerdo con el Canal 12.