Aviones israelíes rompieron la barrera del sonido sobre Beirut, provocando reacciones de Nasrallah, líder de Hezbolá, mientras aumentan las tensiones en la región.
Las autoridades alertan a residentes del norte de Israel
Antes del discurso de Hassan Nasrallah, líder de Hezbolá, aviones israelíes rompieron la barrera del sonido sobre Beirut. Residentes del norte de Israel recibieron advertencias de autoridades locales para permanecer cerca de refugios antiaéreos, a pesar de la ausencia de una directiva oficial del Comando del Frente Interior de las FDI. Estas alertas se producen en un contexto de ataques transfronterizos casi diarios desde el Líbano por parte de Hezbolá, que ha prometido represalias tras el asesinato de su comandante Fuad Shukr por Israel.
En su discurso televisado, Nasrallah condenó las explosiones sónicas como una provocación, calificándolas de «mezquinas». Los residentes de Beirut reaccionaron abriendo ventanas para evitar daños y observando los aviones desde sus balcones. Las FDI no hicieron comentarios sobre estas acciones. Nasrallah enfatizó que la respuesta de Hezbolá al asesinato de Shukr será contundente, destacando que será diferente a reacciones previas y que se coordinará con el «eje de la resistencia».
Las sirenas de alerta sonaron en comunidades del norte de Israel cerca de la frontera con Líbano, aunque una fuente de Hezbolá indicó que la respuesta al asesinato de Shukr aún no se había producido. El asesinato de Shukr fue el segundo ataque israelí en los suburbios del sur de Beirut en diez meses. Hezbolá ha declarado que sus ataques son en apoyo a Gaza en medio del conflicto con Hamás.
Reacciones internacionales y posibles represalias
Pocas horas después del asesinato de Shukr, se reportó la muerte del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, en una explosión en Irán. La República Islámica prometió «castigar» a Israel por ambos asesinatos. Mientras Israel asumió la responsabilidad del asesinato de Shukr, no hizo comentarios sobre la muerte de Haniyeh. Según informes, el Mossad habría colocado una bomba en la habitación donde se hospedaba Haniyeh en Teherán.
Con una posible respuesta coordinada en el horizonte, Nasrallah advirtió a Israel sobre una eventual represalia del «eje de resistencia», incluyendo actores iraníes en Irak y Yemen. Instó a los países árabes a reconocer el peligro israelí, enfatizando que Irán está «obligado» a responder a las agresiones israelíes. Nasrallah también sugirió que la incertidumbre sobre el momento de la respuesta forma parte del «castigo» para Israel.
El líder de Hezbolá cuestionó la fuerza de las FDI, sugiriendo que ya no son una potencia invencible. En abril, un ataque con drones y misiles desde Irán fue frustrado por una coalición que incluía a varios países, entre ellos Israel y Estados Unidos. Nasrallah destacó que la respuesta de Hezbolá podría ser individual o en el marco de una respuesta unificada de los grupos respaldados por Irán en la región.
Incursiones y ataques recientes en la frontera norte
La tarde del martes, después del discurso de Nasrallah, las FDI informaron que Hezbolá lanzó más de 30 cohetes hacia el norte de Israel. En la primera andanada, todos los proyectiles cayeron en zonas deshabitadas. Una segunda tanda de cohetes fue interceptada en parte por el sistema Cúpula de Hierro, aunque algunos impactos causaron incendios.
Los ataques se produjeron después de que un ataque con drones de Hezbolá hiriera a 19 personas en Galilea Occidental. Las FDI también atacaron un depósito de armas de Hezbolá en Kafr Kila y otros objetivos, incluido un lanzacohetes en Abu Shash, en respuesta a estos incidentes.
Desde el 8 de octubre, Hezbolá ha llevado a cabo ataques casi diarios contra comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera. Hasta el momento, estos enfrentamientos han causado la muerte de 25 civiles y 18 soldados israelíes, así como de 399 miembros de Hezbolá y otros 70 de otros grupos terroristas en Líbano.