Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) llevaron a cabo una serie de ataques contra objetivos del grupo terrorista Hezbolá en territorio libanés el miércoles, en represalia por las heridas sufridas por soldados israelíes debido a disparos de cohetes.
Este movimiento se produce tras un incidente matutino en el que varios soldados israelíes fueron hospitalizados por el impacto de cohetes en el norte de Israel, mientras que Hezbolá intensificaba sus acciones contra ciudades israelíes, incluyendo un ataque a una base de las FDI.
El ejército israelí informó: “Hace unos momentos, se identificaron numerosos lanzamientos que cruzaban desde Líbano hacia las áreas de Netu’a, Manara y hacia una base de las FDI en el norte de Israel. Las FDI atacaron las fuentes de los disparos”.
La escalada de tensión se evidenció con el sonido de sirenas en Safed, Meron y en toda la Alta Galilea Occidental, seguido de una andanada de cohetes. Magen David Adom (MDA) asistió a siete personas en Safed, con una en estado grave, otra en estado moderado y seis en estado leve, todos trasladados al Centro Médico Ziv de Safed.
Un incendio en un edificio de Safed, provocado por un impacto directo de cohetes lanzados desde Líbano, fue combatido por los bomberos de la estación regional de Galilea-Golán. “Los equipos, bajo el mando de Reshef Oshri Almakais, trabajaron para extinguir el incendio, buscar a personas atrapadas y cortar las fuentes de energía”, indicó el Cuerpo de Bomberos y de Rescate en un comunicado.
En medio de la situación de tensión, Moshe Davidovitz, jefe del Consejo Regional de Mateh Asher, criticó la respuesta del gobierno israelí a las amenazas de seguridad en el norte del país, sugiriendo una necesidad urgente de acción. “El jefe de la Fuerza Radwan nos escupe una y otra vez, y creemos que llueve. Repito: ¡sin seguridad, no hay norte!” expresó, reflejando la frustración de los residentes del norte ante la guerra entre Israel y Hamás, y las acciones de Hezbolá.
Sayyed Hassan Nasrallah, líder de Hezbolá, declaró que los ataques de su grupo contra Israel continuarían hasta que cesara la “agresión” israelí contra la Franja de Gaza, amenazando con intensificar la situación si el ejército israelí expandía la guerra.
En un trágico desarrollo, ataques israelíes en un pueblo del sur de Líbano resultaron en la muerte de una mujer y dos niños, con al menos otras siete personas heridas, según fuentes de seguridad citadas por Reuters.
Este enfrentamiento marca una escalada significativa en la violencia entre Israel y Hezbolá, aumentando la preocupación por un posible agravamiento del conflicto en la región.