Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) lograron acceder a la residencia del líder de Hamás, Yahya Sinwar, en Shati, poco después de su huida del lugar.
La vivienda, una de las cuatro propiedades de Sinwar, estaba equipada con un sofisticado sistema de seguridad que incluía 40 cámaras de vigilancia perimetrales. Además, se encontraron ventanas con espejos y cortinas adicionales para eludir la detección.
Durante la operación, un soldado notó que en una de las habitaciones faltaba una pequeña cantidad de lechada en el suelo, lo que levantó sospechas sobre la existencia de algo oculto. Al presionar con el pie sobre las baldosas, se abrió una puerta hidráulica doble que reveló la entrada a un búnker con vías de escape al exterior.
Las fuerzas de la División 162 han estado intensamente comprometidas en la zona de Jabaliya. Como parte de sus operaciones en la región, han eliminado a cientos de terroristas en enfrentamientos directos, además de dirigir ataques de artillería y aéreos contra posiciones terroristas, incluyendo edificios fortificados.
La División 162 se encuentra en el epicentro de las operaciones contra Hamás, tanto en la superficie como bajo tierra. Las FDI informan que han atacado el cuartel general de Hamás, su mando en el norte y oficiales militares en el corazón de la ciudad de Gaza. Esto ha permitido a las fuerzas israelíes actuar con total libertad.
El puesto de avanzada central en Jabaliya ha sido objeto de unos 17 ataques por parte de la División 162. En el lugar se encontraron documentos que contenían mapas de las ciudades de la región de Gaza, marcando puntos débiles como escuelas y comedores.
Además, entre Jabaliya y el centro de la ciudad de Gaza se hallaba una de las principales bases de entrenamiento de Hamás, donde incautaron materiales de inteligencia que resultaron cruciales en la operación, así como pruebas de la planificación de un ataque.
Durante una incursión en el hospital de Rantisi, se descubrió que había rehenes retenidos bajo tierra, aunque ya habían sido trasladados. Durante la limpieza y ocupación del barrio, se encontraron los cuerpos de cinco civiles y soldados que habían sido secuestrados y llevados a Israel.
Las FDI estiman que alrededor de mil terroristas han perdido la vida en los combates y que más de 3,000 han sido capturados, algunos de los cuales participaron en el ataque de Hamás en Simjat Torá.
En el campo de refugiados de Jabaliya, aproximadamente 500 sospechosos de actividad terrorista se entregaron a las autoridades, algunos de ellos vinculados a las organizaciones terroristas Hamás y Yihad Islámica y responsables del ataque a las comunidades cercanas a Gaza.
Durante las operaciones, algunos de los terroristas se refugiaron entre la población civil, en hospitales y escuelas, y se destruyeron múltiples infraestructuras enemigas, incluyendo complejos de entrenamiento, instalaciones subterráneas, centros de mando y fábricas de producción de cohetes.