El ejército israelí ha tomado medidas para proteger la identidad de sus soldados ante las crecientes acusaciones de crímenes de guerra, impulsadas por organizaciones pro palestinas. De acuerdo con las nuevas directrices de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), todos los efectivos que participen en combate deberán mantener el anonimato durante las entrevistas con los medios.
A partir de ahora, los soldados de menor rango, es decir, por debajo del grado de general de brigada, serán entrevistados con su rostro cubierto o de espaldas, y sus nombres serán omitidos, como ya ocurre con los miembros de fuerzas especiales y pilotos. Estas medidas también se aplicarán de manera estricta a los soldados que posean ciudadanía extranjera.
En cuanto a los oficiales superiores a general de brigada, aquellos cuyos nombres sean ya de dominio público podrán mostrar su rostro y su nombre completo durante las entrevistas.
Para garantizar que estas medidas sean cumplidas, el Departamento de Derecho Internacional del Procurador general Militar será el encargado de informar a los oficiales antes de cualquier contacto con los medios de comunicación. Además, todas las imágenes deberán ser aprobadas previamente por el Departamento de Censura Militar y Seguridad de la Información.
Aunque las FDI han implementado estas directrices, se desconoce si serán efectivas para frenar los intentos de enjuiciar a los soldados por crímenes de guerra.
Las organizaciones pro palestinas suelen identificar a las tropas a través de contenido compartido en redes sociales durante las operaciones en Gaza, un método mucho más frecuente que el de las entrevistas con los medios. Además, las FDI no han tomado medidas decisivas para evitar que sus soldados publiquen contenido no autorizado en línea.