Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) revelaron que llevan años realizando operaciones contra la unidad de contrabando de armas de Hezbolá en Siria. Estas acciones buscan impedir que armamento iraní llegue al grupo terrorista en el Líbano.
Durante la guerra, diversos ataques han tenido como blanco a la Unidad 4400 de Hezbolá, responsable de transportar armamento desde Irán y otros aliados hacia el Líbano.
El ejército señala que esta unidad, creada en el año 2000 con apoyo iraní, estableció múltiples “rutas estratégicas” en la frontera entre Siria y Líbano. Estas vías facilitaron el envío de armas al grupo terrorista.
Miles de camiones y numerosos aviones transportaron misiles y componentes militares desde Irán hacia Siria y, finalmente, al Líbano, según datos proporcionados por las FDI.
Entre las acciones destacadas contra la Unidad 4400, las FDI mencionan los asesinatos del líder de la unidad, Muhammad Ja’far Qassir, ocurrido en Beirut en octubre, y de su sucesor, Ali Hassan Gharib, en Damasco semanas después. Otros altos mandos también fueron abatidos en estas operaciones.
Las FDI aseguran que los ataques contra las rutas de contrabando de Hezbolá entre Siria y Líbano no son recientes, sino parte de un esfuerzo sostenido durante años.
En un ataque específico de octubre, fue destruido un túnel de 3,5 kilómetros que conectaba Siria con el Líbano, utilizado por Hezbolá para almacenar y trasladar armas iraníes. Según las FDI, este túnel había iniciado su construcción en 2009 y fue completado una década después.
Las FDI subrayan que estas acciones han debilitado la capacidad de Hezbolá para reforzar su arsenal militar y lanzar ataques contra ciudadanos israelíes.