Tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel demolieron la vivienda de un palestino identificado como autor de un ataque en Judea y Samaria que ocasionó la muerte de una mujer embarazada en mayo. Durante el hecho, los médicos practicaron una cesárea de emergencia para extraer a su hijo, quien murió dos semanas después en un hospital. La operación militar se efectuó en la ciudad de Bruqin durante la mañana.
El ataque ocurrió el 14 de mayo en una carretera cercana a la aldea palestina de Bruqin y al asentamiento de Bruchin. Un palestino abrió fuego desde la cuneta contra vehículos israelíes, lo que provocó la muerte de Tzeela Gez, de 30 años, y heridas a su esposo. La víctima se dirigía a un hospital para dar a luz. El bebé, llamado Ravid Haim, nació en el Hospital Beilinson de Petaj Tikva, pero murió 15 días después.
El agresor fue identificado como Naael Samarah, miembro del grupo terrorista Hamás. Cuatro días después del ataque, tropas israelíes lo abatieron a tiros en la misma zona. Posteriormente, las Fuerzas de Defensa de Israel confirmaron la demolición de su vivienda.
El ejército israelí informó que esta acción se enmarca dentro de su política de destruir casas de palestinos acusados de participar en atentados con resultado de muerte.