Al abrir la reunión semanal del gabinete, el primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que en el territorio de Gaza controlado por Israel quedan dos focos de Hamás: uno en Rafah y otro en Jan Yunis. “Serán eliminados”, promete el primer ministro ante su gabinete ahora.
Netanyahu calificó de patéticos los “intentos de Hamás de engañarnos a nosotros, a Estados Unidos y al mundo” y afirmó que fracasarán. “No tendrán éxito, y gradualmente traeremos de vuelta a todos nuestros rehenes”, añadió. “Este es nuestro compromiso”. Resaltó que proteger a las fuerzas de las FDI es prioridad.
“Mi directiva es inequívoca”, dijo Netanyahu. “Si hay algún intento de dañar a nuestros soldados, golpeamos a los que atacan y sus redes, en defensa de nuestras tropas”. Tras las críticas sobre la Casa Blanca añadió: “Informamos a nuestros amigos estadounidenses, pero no buscamos su permiso”.
“Escucho declaraciones que son simplemente falsas. Conservamos toda la responsabilidad de seguridad y no renunciaremos a ella”, afirmó. Netanyahu prometió que Hamás será desarmado y Gaza desmilitarizada. “Es un entendimiento que comparto con el presidente Trump, y estamos actuando de acuerdo con un marco claro. Si no se puede lograr de una manera, se logrará de otra manera, y todos saben cuál es esa otra manera y quién la llevará a cabo”.
Al referirse al Líbano sostuvo que Hezbolá intenta rearmarse y reclamó cumplimiento de compromisos por parte del gobierno libanés. “Esperamos que el gobierno libanés cumpla con sus compromisos, es decir, desarmar a Hezbolá”, dijo Netanyahu, y advirtió sobre la respuesta militar si se reabre un frente.
“Pero está claro que ejerceremos nuestro derecho a la autodefensa según lo estipulado en los términos del alto el fuego. No permitiremos que el Líbano se convierta en un frente renovado contra nosotros, y actuaremos según sea necesario”, agregó. También aseguró que Israel “hará lo que sea necesario para eliminar” la amenaza hutí de Yemen.
A la reunión asistió el filántropo multimillonario Sylvan Adams, quien prometió $100 millones para renovar y expandir el Hospital Soroka en Beersheba, centro que fue dañado por un misil iraní.
