El ejército israelí ha revelado operaciones contra la Unidad 4400 de Hezbolá en Siria, buscando impedir el envío de armas iraníes al Líbano.
Detalles de operaciones de Israel contra Hezbolá
Israel apunta a frenar el contrabando de armas hacia Hezbolá
Por primera vez, el ejército israelí reconoció este lunes sus acciones contra la Unidad 4400, responsable de trasladar armamento desde Irán al Líbano para el grupo terrorista Hezbolá. Estas operaciones han incluido ataques durante la actual guerra con Hezbolá, grupo respaldado por Irán.
Uno de los bombardeos tuvo como objetivo una región fronteriza entre Siria y Líbano, según informaron las autoridades israelíes. La Unidad 4400 se formó en el año 2000, construyendo diversas “rutas estratégicas” con el respaldo de Irán para facilitar el contrabando.
Desde entonces, miles de camiones y aviones han transportado misiles y componentes hacia Siria y Líbano, lo que fue confirmado por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Estos esfuerzos han sido clave para fortalecer el arsenal de Hezbolá, algo que Israel busca detener.
Entre las acciones recientes, se destacan los asesinatos de altos mandos de la unidad, incluido su líder Muhammad Ja’far Qassir en Beirut y su sucesor Ali Hassan Gharib en Damasco. Ambos fueron eliminados en octubre junto con otros comandantes clave del grupo.
Operaciones de Israel contra Hezbolá han sido constantes por años
De acuerdo con las FDI, los ataques contra las rutas de contrabando de Hezbolá no son recientes. Este esfuerzo lleva años, con informes que datan de 2013 sobre bombardeos a cargamentos de armas destinados al grupo terrorista.
Durante años, Israel evitó hacer declaraciones oficiales sobre estas operaciones para no provocar represalias. Sin embargo, en tiempos recientes ha comenzado a reconocer públicamente estas acciones, parte de una campaña aérea para evitar la presencia iraní cerca de su frontera con Siria.
Los ataques dirigidos a la Unidad 4400 han debilitado su capacidad para ampliar su arsenal, según afirman las FDI. Esto ha reducido la posibilidad de que Hezbolá pueda lanzar ataques con misiles contra Israel.
Un túnel de contrabando de 3,5 kilómetros entre Líbano y Siria, construido entre 2009 y 2019, fue destruido en uno de estos ataques a principios de octubre. Este túnel era empleado por Hezbolá para el almacenamiento y transporte de armas provenientes de Irán.
Bombardeos recientes en Al-Qusayr contra rutas de contrabando
El lunes, las FDI confirmaron haber llevado a cabo bombardeos aéreos en la frontera entre Siria y Líbano, centrados en rutas utilizadas por Hezbolá para el contrabando de armas iraníes.
La agencia estatal siria SANA informó que los ataques destruyeron varios puentes en la región de Al-Qusayr y dejaron a dos personas heridas. Esta zona ha sido objetivo frecuente de bombardeos israelíes en los últimos meses debido a su uso como cruce fronterizo para el tráfico de armamento.
Además de las rutas de contrabando, los aviones israelíes han atacado centros de mando de la Unidad 4400 en Al-Qusayr, complementando incursiones en otras zonas como Beirut. Estas acciones forman parte de una ofensiva más amplia contra Hezbolá.
La guerra actual entre Israel y Hezbolá comenzó un día después de los ataques de Hamás el pasado 7 de octubre, cuando el grupo palestino lanzó una ofensiva en el sur de Israel que dejó 1.200 muertos y 251 rehenes, de los cuales 97 permanecen cautivos.
Ataques de Israel contra bastiones de Hezbolá
Al día siguiente de los ataques de Hamás, Hezbolá inició bombardeos en el norte de Israel, lo que obligó a decenas de miles de residentes a evacuar por temor a una invasión. En respuesta, Israel amplió sus operaciones militares contra el grupo chiíta en el Líbano.
A finales de septiembre, Israel lanzó una ofensiva que eliminó a la mayoría de los líderes de Hezbolá, incluyendo a su histórico líder Hassan Nasrallah. Las operaciones continuaron con incursiones terrestres en el sur del Líbano.
El objetivo de esta operación terrestre, según las FDI, es desmantelar bastiones de Hezbolá en la región para garantizar el regreso seguro de los habitantes del norte de Israel, quienes fueron desplazados por los ataques del grupo terrorista.
Las Fuerzas de Defensa de Israel han resaltado que estas acciones buscan reducir significativamente las capacidades de Hezbolá, debilitando su infraestructura militar y minimizando las amenazas hacia la población israelí.