Un perro de la unidad canina militar Oketz captó desesperados gritos de ayuda de uno de los tres rehenes fugados, revelan nuevos detalles de la investigación militar. Este trágico incidente muestra hasta dónde llegaron los cautivos para identificarse ante las Fuerzas de Defensa de Israel antes de ser lamentablemente abatidos por error.
Según la investigación, el 10 de diciembre, las tropas de la unidad de reconocimiento de la Brigada Golani se encontraron en un enfrentamiento con agentes de Hamás que abrieron fuego desde un edificio. En un intento por resolver la situación, un perro de la unidad Oketz fue enviado al edificio, más tarde identificado como el lugar de cautiverio de los rehenes. El perro fue abatido por los hombres armados de Hamás, quienes a su vez fueron abatidos por las fuerzas de Golani.

Este caótico enfrentamiento permitió que Alon Shamriz, Yotam Haim y Samar Talalka lograran escapar de su cautiverio, según lo que ha arrojado la investigación. Durante la batalla, una cámara montada en el perro registró la voz de un rehén, presumiblemente Alon Shamriz, clamando “¡Ayuda!”, y alertando sobre la presencia de rehenes en el lugar. Aunque no se visualizó a los cautivos en la grabación.
La grabación de la cámara corporal del perro no era supervisada en tiempo real y solo se descubrió el 18 de diciembre, después de recuperar el cuerpo del can. Cinco días después de este episodio, Shamriz, Haim y Talalka intentaron acercarse a las tropas, pero fueron abatidos en un malentendido.
Además, los rehenes fugados dejaron un cartel en hebreo en otro edificio de la zona, que rezaba “SOS” y “3 rehenes. Socorro”. Sin embargo, los soldados creyeron que podría tratarse de una trampa explosiva de Hamás, lo que complicó aún más la situación.