El presidente del Líbano, Joseph Aoun, declaró que Israel debe retirarse de los territorios ocupados en el sur de su país antes del 26 de enero, tal como establece el acuerdo de alto el fuego alcanzado con Hezbolá. Aoun hizo esta afirmación durante un discurso frente al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien se encuentra de visita en el país.
En su intervención, el mandatario libanés denunció las continuas infracciones israelíes al acuerdo, señalando que actos como la destrucción de aldeas y viviendas en zonas fronterizas contradicen lo pactado. “Volar casas y destruir aldeas fronterizas contradice completamente lo establecido en el acuerdo de alto el fuego”, afirmó, según informó su oficina.
Por su parte, el líder de Hezbolá, Naim Qassem, instó al gobierno libanés a actuar con firmeza ante las violaciones israelíes, las cuales describió como “más de cientos”. Qassem destacó que el grupo ha mostrado paciencia para dar al Estado la oportunidad de hacer cumplir el acuerdo, pero advirtió que esta actitud no será indefinida.
A pesar del alto el fuego firmado el 27 de noviembre, Israel ha continuado realizando ataques en el sur del Líbano bajo el argumento de neutralizar combatientes y armamento de Hezbolá. Estas operaciones incluyen la presencia de tropas israelíes al sur del río Litani, incumpliendo los términos del acuerdo.
El pacto estipula que Israel tiene hasta el 26 de enero para retirarse completamente del sur del Líbano. Después de esa fecha, únicamente las Fuerzas Armadas Libanesas y la FPNUL tendrán autorización para mantener presencia armada en la región entre el Litani e Israel. Sin embargo, informes desde Israel sugieren que la retirada podría retrasarse debido a la lenta movilización del ejército libanés en esa zona.
Elegido el 9 de enero, Joseph Aoun ha prometido reforzar el control del Estado sobre el uso de armas, lo que se percibe como un desafío indirecto a Hezbolá, la única milicia que no entregó sus armas tras la guerra civil libanesa. Este respaldo al monopolio estatal ha sido bien recibido por Arabia Saudita, Estados Unidos y Francia, principales aliados internacionales del nuevo mandatario.
El sábado, Antonio Guterres destacó la importancia de la reciente elección presidencial y el nombramiento de un primer ministro para consolidar las instituciones del país. Expresó su esperanza en que el despliegue del ejército libanés en todo el territorio permita abrir un nuevo capítulo de paz y prometió el apoyo de la comunidad internacional para la recuperación del Líbano.
El líder de Hezbolá, Qassem, subrayó que su grupo y el movimiento Amal desempeñaron un papel clave para alcanzar el consenso político que permitió la elección de Aoun. Advirtió que nadie podrá excluir a Hezbolá de la política interna y elogió el acuerdo de alto el fuego en Gaza, afirmando que los sacrificios palestinos evitaron la desaparición de la causa palestina.
Mientras tanto, Guterres y el presidente francés, Emmanuel Macron, coincidieron en la necesidad de acelerar la implementación del alto el fuego entre Israel y Hezbolá. Macron instó a que se respeten los términos del acuerdo para garantizar la estabilidad en la región.
la guerra reciente entre Israel y Hezbolá, que comenzó tras los ataques diarios de este grupo desde octubre de 2023, se saldó con una ofensiva israelí que debilitó significativamente la estructura de mando de Hezbolá. Los enfrentamientos forzaron el desplazamiento de miles de residentes del norte de Israel y dejaron secuelas profundas en la región.
A pesar del alto el fuego, las tensiones siguen presentes, y las partes implicadas enfrentan el desafío de cumplir con los términos del acuerdo para evitar una escalada de la guerra.