Una mina terrestre dejó gravemente herido a un reservista de las Fuerzas de Defensa de Israel después de que su unidad ingresó accidentalmente en un campo minado israelí mientras operaba cerca de la frontera con el Líbano. El ejército confirmó el incidente y aseguró que se encuentra bajo investigación.
El soldado fue trasladado a un hospital local, donde se le practicó una cirugía. Posteriormente, el centro médico informó que su estado se estabilizó y presentó una mejoría.
No se ha confirmado en qué lado de la frontera ocurrió la explosión, ni si el campo minado pertenece a los instalados durante la guerra contra Hezbolá, conflicto que concluyó el 27 de noviembre con un alto el fuego. Tras ese acuerdo, Israel se retiró de casi todos los puntos que ocupaba en el sur del Líbano.
Tampoco se ha precisado si la mina era de tipo antitanque o antipersonal. Aunque Israel no ha firmado el Tratado de Ottawa de 1997, en 2011 estableció una Autoridad gubernamental para retirar minas no esenciales para su seguridad nacional.
El territorio israelí contiene minas colocadas por Jordania y Siria en las décadas de 1950 y 1960, además de explosivos instalados por Israel tras la Guerra de los Seis Días en 1967. También se han detectado minas que han migrado desde Egipto, según la autoridad correspondiente, que advierte sobre su peligrosidad incluso décadas después de su colocación.
Este incidente se registró un día después de que un combatiente del Batallón 12 de la Brigada Golani resultara gravemente herido en el sur de Gaza, aparentemente por un disparo accidental.
La guerra contra Hezbolá comenzó el 8 de octubre de 2023, cuando el grupo terrorista inició ataques casi diarios contra el norte de Israel, lo que forzó la evacuación de unas 60.000 personas. Esto ocurrió un día después de que Hamás, también apoyado por Irán, perpetrara una masacre en el sur de Israel, asesinando a unas 1.200 personas y tomando 251 rehenes, lo que detonó la guerra en Gaza.
Con la mediación de Estados Unidos y Francia, el alto el fuego estipuló que Hezbolá debía abandonar el sur del Líbano y ceder el control al ejército libanés y a la fuerza de paz de la ONU, UNIFIL.
Una fuente de Hezbolá informó a la AFP que el grupo ya entregó gran parte de su territorio en el sur del Líbano. De acuerdo con el Canal 12, el ejército libanés ha mejorado bajo la supervisión estadounidense, pero aún carece de la fuerza suficiente para controlar completamente la zona, a pesar del respaldo francés.
Hezbolá ha mostrado disposición a dialogar sobre el desarme con el presidente libanés Joseph Aoun, quien cuenta con el respaldo de Estados Unidos y ha prometido mantener el monopolio estatal de las armas. Sin embargo, el grupo continúa introduciendo armamento desde Irán, según los reportes.