La organización radical de izquierda B’Tselem está lanzando una nueva campaña que hace un llamamiento a los soldados de las FDI establecidos en la frontera con la Franja de Gaza para que rechacen las órdenes y no abran fuego contra los árabes que intentan infiltrarse en Israel.
«Anticipándose a las próximas manifestaciones del próximo viernes, la organización reitera que disparar contra manifestantes desarmados es ilegal y que las órdenes para llevar a cabo ese tiroteo son claramente ilegales», dijo la organización en un comunicado.
El cartel que acompañaba a la campaña decía: «Lo siento, señor, no estoy disparando». Como mensaje a los soldados, se escribió que «el uso de la fuerza letal solo se permite en situaciones de peligro real e inmediato para la vida humana, a falta de otra opción».
«Al contrario de lo que implican las declaraciones de altos oficiales en el ejército y de ministros en el gobierno, el ejército no puede hacer lo que le plazca e Israel no determina lo que está permitido y lo que está prohibido al tratar con los manifestantes», afirma la organización de extrema izquierda.
«Israel, como cualquier otro país en el mundo, está sujeto a la ley internacional, que restringe el uso de armas en general y munición real en particular», agregó B’Tselem. «Israel no puede decidir por sí mismo que estas reglas no se apliquen».