Los estudiantes de la Universidad Oberlin College construyeron un monumento en memoria de los treinta y cuatro muertos en los bombardeos de las FDI durante la Operación Cinturón Negro en la Franja de Gaza a principios de este mes, la mayoría de ellos terroristas de la Jihad Islámica, según el periódico Yediot Ahronot.
Los estudiantes son judíos pertenecientes a la organización Voz Judía por la Paz (JVP) y estudiantes pertenecientes a la Organización de Estudiantes de Liberación de Palestina.
Según se informa, la administración del colegio no retiró ni condenó el monumento, e incluso admitió haber dado luz verde a la medida por motivos de libertad de expresión.
El Ministro de Seguridad Interna Gilad Erdan condenó la construcción del monumento.
El miércoles pasado estudiantes antisionistas se congregaron en las calles de Chicago para “honrar y recordar” a un comandante de la Jihad Islámica Palestina (PIJ) y a agentes terroristas que fueron eliminados en la última ronda de combates entre la PIJ y las FDI.
El “evento”, organizado por Estudiantes por la justicia en Palestina (SJP) Chicago, se realizó para “condenar el ataque constante de Israel contra Gaza, que no ha sido controlado desde el comienzo de la ocupación”, dijeron los organizadores en un post en las redes sociales.
Docenas de espectadores escucharon cómo los activistas del SJP utilizaban un megáfono para difundir los nombres de los palestinos muertos en Gaza la semana pasada durante la escalada de las hostilidades contra Israel, un suceso que un orador describió como “un ataque de dos días contra el pueblo de Gaza, en el que perdieron la vida treinta y seis palestinos inocentes”.
El primer nombre que se leyó fue Bahaa Abu al-Atta, el alto comandante de la Jihad Islámica Palestina eliminado en un ataque dirigido por las fuerzas israelíes el 12 de noviembre. Según el Teniente General Al-Atta, el objetivo era Al-Atta. Aviv Kohavi, ya que había “socavado la tranquilidad en el sur de Israel” y “actuado de todas las maneras posibles para sabotear los intentos de calma con Hamás”.
“Era una bomba viviente, y hasta hoy trabajaba y planeaba ataques. Él fue responsable de la mayoría de los ataques que tuvieron lugar el año pasado”, añadió Kohavi.