Ismail Haniyeh, líder de la organización terrorista Hamás, con sede en Gaza, dijo el jueves que Hamás rechaza la próxima conferencia económica dirigida por Estados Unidos en Bahrein la próxima semana, ya que esto significaría la “normalización” árabe de las relaciones con Israel.
En una rara sesión informativa para periodistas internacionales, Haniyeh también acusó a Israel de no aplicar los acuerdos destinados a garantizar la calma en la Franja de Gaza controlada por Hamás.
“Expresamos claramente nuestro rechazo y rechazo a que cualquier país árabe o islámico acoja una conferencia de este tipo, lo cual es una normalización bajo la ocupación”, dijo Haniyeh, refiriéndose a Israel.
La administración del presidente estadounidense Donald Trump organizó una conferencia en Manama los días 25 y 26 de junio para presentar el componente económico del plan de paz entre árabes e israelíes.
El yerno de Trump, Jared Kushner, está desarrollando el tan esperado plan, pero la Autoridad Palestina lo rechazó de antemano, acusando a la administración de Trump de ser parcial contra Israel.
La parte política de la conferencia probablemente se pospondrá, al menos después de las elecciones israelíes de septiembre, y posiblemente hasta noviembre, después de la formación de un nuevo gobierno.
La Autoridad Palestina también ha acusado a Estados Unidos de intentar utilizar la oferta potencial de miles de millones de dólares en inversiones para evitar abordar las causas políticas de su sufrimiento, incluyendo lo que llama la “ocupación” israelí.
“Rechazamos la conferencia de Manama y la transformación de la causa palestina de la política a la economía”, dijo Haniyeh.
Haniyeh también pidió al rey Hamad de Bahrein que “no celebre este seminario”, jurando protestar “en todas las tierras palestinas y más allá”.
Desde 2008, Hamás e Israel han librado tres guerras y existen temores de que la cuarta guerra se avecine.
El acuerdo alcanzado en noviembre tenía por objeto garantizar la calma a cambio de aliviar el bloqueo de la Franja de Gaza por parte de Israel.
El Estado judío nunca había confirmado públicamente el acuerdo, pero desde entonces ha permitido a Qatar atraer millones de dólares en efectivo e invertir en un enclave dirigido por Hamás.
En mayo, ambas partes se acercaron a un nuevo conflicto cuando los grupos terroristas Hamás y la Jihad Islámica dispararon cientos de cohetes desde Gaza y el ejército israelí tomó represalias contra docenas de objetivos terroristas.
Haniyeh acusó a Israel de no aplicar los acuerdos alcanzados.
“Los acuerdos de hoy se encuentran en la zona de peligro debido a la falta de implementación de los acuerdos alcanzados como resultado de la ocupación (israelí)”.
Hizo hincapié en que Israel permite que los pescadores trabajen frente a la costa de Gaza hasta 18 millas náuticas de la costa, diciendo que Israel prometió permitirlo hasta 18 millas náuticas de la costa.
“La semana pasada, Israel prohibió toda la pesca de altura, aunque desde entonces la ha reanudado a seis millas. La ocupación israelí utiliza este rango como una forma de chantaje”, dijo Haniyeh.
“No estamos en contra de una paz justa (con Israel) basada en derechos justos, pero sí en contra de la rendición”, añadió.
Israel afirma que estas restricciones son necesarias para aislar a los terroristas de Hamás, alegando que un grupo terrorista a menudo trata de introducir armas de contrabando en la Franja de Gaza.