La organización terrorista Hamás declaró el miércoles que «Al-Quds [en su totalidad] es la capital eterna de Palestina, no su parte oriental u occidental, y es una ciudad islámica árabe».
La declaración, lanzada en honor al 30 aniversario de la fundación de Hamás, es en respuesta al reconocimiento del presidente estadounidense Donald Trump de que Jerusalén es la capital de Israel.
«El reconocimiento de Jerusalén como la capital del Estado de Israel no cancelará el derecho de las personas nacionales y religiosas palestinas a la ciudad, y Al-Quds seguirá siendo un estado islámico árabe», subrayó Hamás.
El grupo terrorista destacó además que continuaba «el camino de la liberación y la resistencia en todos sus aspectos hasta que se liberara la última capa de tierra palestina histórica», y señaló que «bombardeará la Tel Aviv ocupada que se estableció en nuestra tierra ocupada en Jaffa».
La declaración también pidió el fin de la coordinación de seguridad de la Autoridad Palestina con Israel y subrayó que el «derecho de retorno» es un derecho privado y colectivo que no puede ser revocado por ninguna de las partes.
A principios de esta semana, Mahmoud al-Zahar, miembro del Buró Político de Hamás y uno de los líderes de la organización terrorista, prometió que el grupo continuaría «el camino de la resistencia para liberar cada centímetro de Palestina de la inmundicia de la ocupación».
«La promesa de Al’láh se hará realidad en el sistema de seguridad del mundo venidero, en el que Al-Quds está vinculado a la mezquita Al-Aqsa», dijo.
En un mensaje a Israel, Zahar agregó: «Cuidado con el poder de Hamás y el poder de las Brigadas [Al-Qassam]».