Un comandante de un grupo dentro de la milicia chiita de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) apoyadas por Irán tuiteó que la afirmación del primer ministro iraquí Adel Abdul-Mahdi de que Israel estaba detrás de los recientes ataques a posiciones del PMF era una “luz verde para tomar represalias contra Israel”.
Según la prensa iraní, Abu Ala al-Walai, comandante del grupo Kata’ib Sayyid al-Shuhada del PMF, tweeteó la declaración después de que Abdul-Mahdi le dijera a Al Jazeera que “las investigaciones sobre el ataque a algunas posiciones de las Fuerzas de Movilización Popular indican que Israel lo llevó a cabo”.
Ahmed al-Maksousi, segundo al mando del grupo, dijo a al-Arabu al-Jadeed que pidió al gobierno iraquí que pasara por los canales diplomáticos presentando quejas a las Naciones Unidas, y añadió que en los próximos días se reunirán diferentes facciones en Bagdad.
Al-Maksousi subrayó que “todas las opciones están abiertas, especialmente porque nos reservamos el derecho de responder y la entidad sionista no está lejos del alcance del fuego”.
Hamid al-Jazairi, secretario general adjunto de las Brigadas Khorasani, declaró que tendrían una posición al respecto y señaló que las “facciones de la resistencia” no solo están presentes en Irán, sino también en Siria y Líbano. Añadió que “la respuesta a Israel no tiene que ser desde territorio iraquí”.
Al-Jazairi afirmó que habrá una respuesta “adecuada” de las facciones a los bombardeos “muy pronto”, y añadió que se anunciará “oportunamente”.
Durante una reunión del gabinete en agosto, Abdul-Mahdi explicó la “alta disposición” de las fuerzas armadas iraquíes a defender a Irak y a sus ciudadanos y subrayó la disposición de Irak a responder con firmeza y por todos los medios disponibles a cualquier agresión.
Ahmed al-Asadi, un oficial de las Fuerzas de Movilización Popular, dijo en agosto que el ataque a la sede de las FMP en dos bases iraquíes en agosto y la entrada de Israel en territorio iraquí es una “declaración de guerra contra Irak, su pueblo y su soberanía”, según Al-Sumaria.
“La entrada de Israel en nuestra esfera nacional declara la guerra contra Irak, su pueblo, su soberanía y capacidades, y el silencio sobre la agresión no es una posición racional, pero la racionalidad y el realismo político requieren el agotamiento de las opciones diplomáticas con el Consejo de Seguridad de la ONU para que Irak, su ejército y su pueblo se encuentren en una situación de disuasión militar contra la agresión y los aviones teledirigidos”, dijo al-Asadi.
Desde principios de julio, múltiples ataques aéreos han golpeado las bases de las milicias chiítas apoyadas por Irán en Irak. Los recientes ataques han golpeado posiciones cerca de la frontera entre Siria e Irak.