Alemania prohibirá a la aerolínea iraní Mahan Air en sus aeropuertos, informaron los medios el lunes, en una escalada de sanciones adoptadas por la Unión Europea contra Irán por los ataques contra opositores en el bloque.
«La Oficina Federal de Aviación (LBA) suspenderá esta semana la licencia de operación de la aerolínea iraní Mahan Air«, informó el diario Sueddeutsche Zeitung, con sede en Múnich.
Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Berlín dijo al periódico que «no informa sobre los procesos internos de toma de decisiones políticas».
Mahan Air, la segunda aerolínea más grande de Irán después de Iran Air, opera cuatro vuelos a la semana entre Teherán y las ciudades alemanas Duesseldorf y Munich. Los funcionarios de defensa israelíes han identificado a la aerolínea como uno de los transportistas de carga sospechosos de llevar material de guerra de Irán a sus milicias proxy en Siria. Como resultado, está sujeto a sanciones por parte del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
Un vuelo de Mahan Air se dirigía a Siria el domingo por la tarde, pero se regresó después de los ataques israelíes reportados en y alrededor de la capital siria, Damasco, según los datos de vuelo. La aerolínea realiza vuelos casi diarios entre Irán y Siria.
A principios de este mes, la Unión Europea fijó sanciones contra los servicios de seguridad de Irán y dos de sus líderes, acusados de participar en una serie de asesinatos y planearon ataques contra los críticos de Teherán en los Países Bajos, Dinamarca y Francia.
Las medidas de Bruselas incluían la congelación de fondos y activos financieros pertenecientes al ministerio de inteligencia de Irán y a los funcionarios individuales, pero no se dirigieron a ninguna empresa.
En contraste, Mahan Air fue incluido en la lista negra por los Estados Unidos en 2011, ya que Washington dijo que la aerolínea estaba brindando apoyo técnico y material a una unidad de élite de la Guardia Revolucionaria de Irán conocida como la Fuerza Quds.
El Tesoro de los Estados Unidos ha amenazado con imponer sanciones contra países y compañías que ofrecen los 31 derechos de aterrizaje de aeronaves o servicios tales como comidas a bordo.
Las firmas alemanas se han visto especialmente presionadas por el embajador estadounidense Richard Grenell, un aliado cercano del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por las sanciones contra Irán.
El operador ferroviario Deutsche Bahn, Deutsche Telekom, Daimler, Mercedes-Benz, y el grupo industrial Siemens han dicho que detendrán sus operaciones en el país.
La semana pasada, las autoridades alemanas dijeron que habían arrestado a un asesor militar germano-afgano bajo sospecha de espiar para Irán.