RIYADH, Arabia Saudita – El rey saudí Salman lanzará el miércoles la construcción de una “ciudad del entretenimiento” cerca de Riad, dijo la autoridad, como parte de una serie de proyectos multimillonarios a medida que el reino busca diversificar su economía basada en el petróleo.
El proyecto de 334 kilómetros cuadrados (129 millas cuadradas) en Qiddiya, al suroeste de Riyadh, rivalizaría con Walt Disney e incluiría parques temáticos de alta gama, instalaciones para deportes de motor y un parque safari, dicen las autoridades.
La instalación destaca un “esfuerzo incesante para desarrollar gigaproyectos que ayudarán a lograr muchos retornos económicos directos e indirectos”, dijo el funcionario del proyecto, Fahd bin Abdullah Tounsi en un comunicado del gobierno el lunes.
El presidente ejecutivo de Qiddiya, Michael Reininger, dijo que espera que el proyecto atraiga a inversionistas extranjeros en entretenimiento y otros sectores, pero no especificó el costo total de la construcción.
Tales proyectos son una creación del Príncipe Heredero Mohammed bin Salman, un autodenominado agente de cambio liberal que es el principal arquitecto del amplio programa de reforma “Visión 2030”.
Arabia Saudita ha deslumbrado a los inversores con varios planes para proyectos “giga” de alta tecnología, financiados en parte por su fondo soberano de riqueza, pero algunos escépticos cuestionan su viabilidad en una era de petróleo barato.
El reino ha presentado los planos para construir NEOM, un megaproyecto catalogado como un Silicon Valley regional, además del proyecto del Mar Rojo, un destino turístico con arrecifes de coral, ambos con un valor de cientos de miles de millones de dólares.
Los analistas dicen que los proyectos podrían crear presiones de financiamiento en un momento en que el gobierno enfrenta un enorme déficit presupuestario y el crecimiento de la economía no petrolera del reino está cobrando cada vez menos impulso.
La reforma se debe en parte a un motivo económico para impulsar el gasto nacional en entretenimiento, ya que el reino se tambaleó por una caída del petróleo desde 2014.
Los sauditas actualmente gastan miles de millones de dólares anualmente para ver películas y visitar parques de diversiones en centros turísticos cercanos como Dubai y Bahrein.
En febrero, la Autoridad de Entretenimiento General de Arabia Saudita (GEA, por sus siglas en inglés) anunció que realizará más de 5.000 festivales y conciertos en 2018, duplicará el número del año pasado y bombeará $ 64 mil millones en el sector en la próxima década.