Las fuerzas estadounidenses experimentaron un ataque reciente en una base en el oeste de Irak, informó un funcionario de defensa de Estados Unidos. Este incidente marca el segundo asalto contra las tropas estadounidenses después de una interrupción que duró más de dos meses.
Este reciente ataque se produjo después de otro incidente durante el fin de semana, donde se lanzaron cohetes desde el norte de Irak hacia una base en Siria que alberga fuerzas de una coalición liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico.
Desde mediados de octubre, las tropas estadounidenses en Oriente Medio han enfrentado múltiples ataques, aunque hubo una pausa en esta serie de hostilidades tras intensos bombardeos estadounidenses a inicios de febrero, dirigidos a objetivos asociados a Irán.
“Hubo un ataque ayer contra la base aérea de Al-Asad que no se saldó con heridos ni daños”, indicó el funcionario de defensa, quien prefirió mantener su anonimato y no especificó los detalles del ataque. “Este fue el segundo ataque contra las fuerzas estadounidenses desde el 4 de febrero”, agregó.
Desde octubre, se han documentado más de 165 ataques contra las fuerzas estadounidenses en Irak y Siria, coincidiendo con el comienzo del último enfrentamiento entre Israel y el grupo terrorista Hamás.
Además, a finales de enero, un ataque con drones en Jordania acabó con la vida de tres soldados estadounidenses, lo cual llevó a Washington a realizar ataques contra numerosos objetivos vinculados a Irán en Irak y Siria. Estos ataques aéreos precedieron a una pausa en las hostilidades que se extendió hasta finales de este mes.
La mayoría de estos ataques han sido reivindicados por la Resistencia Islámica en Irak, un conglomerado de grupos apoyados por Irán que expresan su descontento por el apoyo estadounidense a Israel. Sin embargo, ninguno de los ataques de este mes ha sido reivindicado hasta ahora.