El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibió recientemente un informe del asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan, con opciones sobre posibles ataques a instalaciones nucleares iraníes en caso de que Teherán avance hacia la fabricación de un arma nuclear. Según el sitio Axios, la presentación ocurrió en una reunión secreta hace varias semanas.
Funcionarios indicaron que el encuentro no se basó en nueva información y que Biden aún no ha tomado decisiones definitivas. Una fuente describió la reunión como parte de una planificación prudente ante diversos escenarios, mientras que otra señaló que el enfoque estuvo en analizar si Irán ha realizado acciones nucleares que ameriten una respuesta militar urgente antes de la transición presidencial.
Sullivan, en una conferencia reciente, destacó los “golpes estratégicos” sufridos por Irán, como la caída del régimen de Assad en Siria, ataques israelíes en su territorio y ofensivas contra Hezbolá y Hamás. Señaló la necesidad de reflexionar sobre posibles ajustes doctrinales frente a estos acontecimientos.
El informe llega semanas antes del posible regreso de Donald Trump a la presidencia. Durante su mandato anterior, Trump aplicó una estrategia de “máxima presión” contra Irán, retirándose del acuerdo nuclear de 2015 y reimponiendo sanciones severas. Irán respondió incumpliendo los límites nucleares del pacto, enriqueciendo uranio y utilizando centrifugadoras avanzadas.
Las negociaciones indirectas entre la administración Biden y Teherán no han logrado revivir el pacto. Durante su campaña, Trump afirmó que alcanzar un nuevo acuerdo es crucial para evitar consecuencias graves.
Por otra parte, el viceministro de Asuntos Exteriores iraní, Kazem Gharibabadi, confirmó que la próxima ronda de conversaciones nucleares con tres países europeos se realizará el 13 de enero en Ginebra. Irán retomó discusiones nucleares en noviembre con Gran Bretaña, Francia y Alemania tras tensiones provocadas por una resolución europea que acusaba a Teherán de no cooperar con el organismo nuclear de la ONU.
El jefe del OIEA, Rafael Grossi, advirtió en diciembre sobre un acelerado enriquecimiento de uranio por parte de Irán, alcanzando un 60% de pureza, cercano al 90% necesario para armas nucleares. Aunque el líder supremo iraní, Alí Jamenei, se opone aparentemente a construir bombas nucleares, las acciones de Irán suscitan preocupación internacional, especialmente en Israel, que ha prometido impedir que Teherán desarrolle armas nucleares.