El gobierno de Biden ha pedido a China que considere la posibilidad de liberar reservas de crudo en un esfuerzo por satisfacer las demandas de suministro, dijo el jueves la Casa Blanca.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, manifestó en una conferencia de prensa que los miembros del equipo de seguridad nacional de Biden han “discutido con una serie de países, incluyendo a China, la necesidad de satisfacer las demandas de suministro allá afuera”.
“Pero esa es una conversación en curso y que estamos teniendo con una serie de socios”, expresó Psaki a los periodistas.
Otros grandes consumidores con los que la Administración ha mantenido supuestamente este tipo de conversaciones son India, Japón y Corea del Sur, según informa Reuters, citando a varias personas familiarizadas con las peticiones.
Biden planteó la cuestión de la liberación de las reservas de crudo durante una reunión virtual con el líder chino Xi Jinping el martes, informa Bloomberg.
Una portavoz de la Administración Nacional de Alimentos y Reservas Estratégicas de China dijo a Bloomberg que “la oficina está llevando a cabo el trabajo de liberación de petróleo crudo en este momento”, sin embargo, no está claro si China ya tenía planes para hacerlo o si la medida fue impulsada por la solicitud de Biden.
“Publicaremos más detalles sobre el volumen de petróleo y la fecha de su venta en nuestro sitio web a su debido tiempo, al igual que hicimos en la primera subasta pública”, manifestó la portavoz de la oficina de reservas.
Si se lleva a cabo, sería la primera vez que China, el segundo mayor consumidor de petróleo del mundo y el mayor importador, participaría en una venta coordinada con Estados Unidos.
Tanto Pekín como Washington comparten la preocupación por el aumento de los precios del petróleo y los combustibles, así como por el incremento de los niveles de inflación, que en Estados Unidos se encuentran actualmente en su nivel más alto desde 1990.
Las discusiones conjuntas esperan aportar estabilidad a los mercados energéticos mundiales y se producen después de que los precios del crudo alcanzaran el mes pasado un máximo de varios años.
Este año, China ha recurrido a sus reservas nacionales en un esfuerzo por reducir los precios del crudo. En septiembre, el país celebró su primera subasta pública de reservas de petróleo a un grupo selecto de refinadores nacionales.
Mientras tanto, las peticiones de Biden a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para que aumente la producción en medio del descenso de la oferta y el aumento de los precios de la energía han sido rechazadas.
La Casa Blanca ya presionó a la OPEP en agosto para que aumentara la producción de petróleo más rápidamente, afirmando que su acuerdo previo de julio de aumentar la producción cada mes en 400.000 barriles diarios a partir de agosto hasta noviembre era “simplemente insuficiente” durante un “momento crítico de la recuperación mundial”.
Pero la OPEP y sus aliados productores de crudo, la OPEP-plus, acordaron el 4 de noviembre mantener su plan de aumentar gradualmente la producción de crudo en 400.000 barriles diarios cada mes, al considerar que la recuperación económica es demasiado inestable para justificar más oferta.
El cártel de 13 miembros tiene previsto eliminar el resto de los recortes de producción instituidos en 2020 en respuesta a la pandemia del COVID-19 y al desplome de la demanda.
“La reunión reafirmó el compromiso continuo de los países participantes en la Declaración de Cooperación (DoC) para garantizar un mercado petrolero estable y equilibrado, el suministro eficiente y seguro a los consumidores y para proporcionar claridad al mercado en momentos en que otras partes del complejo energético, fuera de los límites de los mercados petroleros, están experimentando una extrema volatilidad e inestabilidad, y para seguir adoptando un enfoque proactivo y transparente que ha proporcionado estabilidad a los mercados petroleros”, dijo la OPEP en un comunicado.
Estados Unidos tiene la mayor reserva estratégica de petróleo del mundo, con 727 millones de barriles, mientras que China no publica información sobre sus niveles de reservas estratégicas, aunque la consultora Energy Aspects estimó a principios de este año que las reservas estatales de petróleo de China tienen unos 220 millones de barriles de crudo, lo que equivale a 15 días de demanda.
Si China y Estados Unidos acuerdan tomar medidas conjuntas en relación con el crudo, la medida podría repercutir en el precio mundial del petróleo.