El autoproclamado presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, ha presentado una lista de exigencias que quiere que la UE aplique para resolver la crisis de los inmigrantes en la frontera entre Bielorrusia y Polonia, dijo la ministra de Asuntos Exteriores de Estonia, Eva-Maria Liimets, en una entrevista con ETV.
“Quiere que se detengan las sanciones, [y] que se le reconozca como jefe de Estado para poder continuar”, dijo Liimeths, explicando que Lukashenko expresó estas condiciones durante una conversación telefónica con la canciller alemana en funciones, Angela Merkel, el 15 de noviembre.
La UE no reconoce a Lukashenko como presidente de Bielorrusia y considera amañadas las elecciones celebradas en agosto del año pasado. En su última resolución sobre la situación en Bielorrusia, el Parlamento Europeo declaró que los poderes de Lukashenko expiraron en noviembre de 2020, y por tanto cualquier documento firmado por él, incluido un acuerdo de integración con Rusia, es ilegítimo.
En respuesta a la represión de la oposición bielorrusa y al aterrizaje forzoso del vuelo de Ryanair, la UE adoptó varios paquetes de sanciones, que impiden a Bielorrusia vender productos petrolíferos y obtener préstamos en los mercados de capitales europeos. Las autoridades de la UE han comenzado a debatir el siguiente, el quinto paquete de sanciones, debido a la crisis de los migrantes en la frontera entre Polonia y Bielorrusia. Se prevé que las sanciones afecten a 30 personas físicas y jurídicas, entre ellas el Ministro de Asuntos Exteriores bielorruso, Vladimir Makei, y la compañía aérea nacional Belavia.
Los ministros de Asuntos Exteriores de los países de la UE aprobaron la decisión de endurecer las sanciones el 15 de noviembre y, según Liimetz, seguirán en vigor, a pesar del ultimátum de Lukashenko.