Todos los bancos bielorrusos se han conectado al Sistema de Transferencia de Mensajes Financieros (PESF) del Banco de Rusia, dijo el jefe de la División de Desarrollo y Regulación del Sistema Nacional de Pagos, del Banco Central de Rusia, Denis Baryshkov, al intervenir en el VIII Foro Nacional de Pagos.
Ahora 38 instituciones financieras de nueve países están conectadas al sistema ruso, que comenzó a desarrollarse en 2014 tras la anexión de Crimea y el colapso de las relaciones con Occidente, dijo Baryshkov.
“En los últimos años, el PESA ha mostrado una alta fiabilidad y un funcionamiento ininterrumpido las 24 horas del día, tanto con usuarios rusos como extranjeros”, añadió.
En 2018, el presidente ruso, Vladímir Putin, firmó un decreto que permite a los bancos extranjeros conectarse al PESA. Pero el sistema es utilizado principalmente por los participantes de los países de la antigua URSS, mientras que las grandes organizaciones financieras occidentales todavía lo ignoran.
Entre los 332 participantes del sistema se encuentran JSC İşbank (Turquía), MUFG Eurasia Bank (filial del japonés MUFG), Crédit Agricole CIB (Francia), SEB BANK (Suecia) y Toyota Bank (Japón).
A pesar de los numerosos llamamientos para que China rechace conjuntamente el uso del dólar estadounidense, sólo el Banco de China se incorporó al sistema del Banco Central de Rusia.
Técnicamente, ampliar el número de participantes en el PESA no es un problema, pero para ello se necesita también voluntad política, se quejó en junio la vicepresidenta primera del Banco Central ruso, Olga Skorobogatova.
“Necesitamos su ayuda, y necesitamos a otros ministerios y departamentos: el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ministerio de Hacienda, el Ministerio de Finanzas. Porque siempre es un acuerdo intergubernamental”, explicó.