El primer ministro británico, Boris Johnson, dice que la invasión rusa de Ucrania es un “punto de inflexión para el mundo”, argumentando que la victoria de las fuerzas del presidente ruso Vladimir Putin anunciaría “una nueva era de intimidación”.
En su intervención en una conferencia del Partido Conservador, Johnson afirma que Putin está “aterrorizado” de que el ejemplo de una Ucrania libre desencadene una revolución prodemocrática en Rusia.
Dice que “un Putin victorioso no se detendrá en Ucrania, y el fin de la libertad en Ucrania significará la extinción de cualquier esperanza de libertad en Georgia y luego en Moldavia, significará el comienzo de una nueva era de intimidación en toda Europa del Este, desde el Báltico hasta el Mar Negro”.