El ex primer ministro británico, Boris Johnson, sorprendió al país al renunciar como legislador después de recibir una sanción por engañar al Parlamento. Su dimisión podría aumentar las tensiones en el gobernante Partido Conservador y dar lugar a elecciones especiales en los suburbios de Londres.
Johnson renuncia tras sanción por «partygate»
Boris Johnson presentó su dimisión luego de recibir los resultados de una investigación parlamentaria relacionada con declaraciones engañosas sobre el «partygate», una serie de fiestas gubernamentales que violaron las normas durante la pandemia.
Johnson acusó a sus oponentes políticos de intentar derrocarlo y sugirió que podría intentar volver.
Críticas a la comisión investigadora
Johnson calificó a la comisión investigadora como un «tribunal canguro» y afirmó que su objetivo desde el principio ha sido declararlo culpable, sin importar los hechos.
Su dimisión evita una posible suspensión de la Cámara de los Comunes y le brinda la libertad de postularse nuevamente como candidato al Parlamento.
Tensiones en el Partido Conservador
La renuncia de Johnson podría aumentar las tensiones dentro del gobernante Partido Conservador, que ha sido sacudido por escándalos y divisiones internas.
Johnson fue líder del partido y lo llevó a una victoria aplastante en 2019, pero se vio obligado a renunciar menos de tres años después debido a presiones internas.
Elecciones especiales en los suburbios de Londres
La dimisión de Johnson dará lugar a elecciones especiales para encontrar un reemplazo para su escaño en los suburbios de Londres.
Los resultados de estas elecciones serán clave para determinar el futuro político en la región y podrían influir en el equilibrio de poder en el Parlamento.
Considerando volver a la política
En su declaración de dimisión, Johnson sugirió que está considerando la opción de volver a la política.
Además, fue muy crítico con su sucesor, Rishi Sunak, lo que indica tensiones internas en el Partido Conservador y la necesidad de recuperar el impulso y la creencia en lo que el país puede lograr.
Polémica por honores otorgados
Horas antes de su dimisión, el rey Carlos III otorgó títulos de caballero y otros honores a los leales ayudantes y aliados de Boris Johnson, siguiendo la tradición política para ex primeros ministros. Esta acción generó críticas por parte de los opositores al líder destituido, quienes consideraron el acto como un favoritismo inapropiado.
La dimisión de Boris Johnson como legislador tras recibir una sanción por engañar al Parlamento ha generado sorpresa en el país. Su renuncia podría aumentar las tensiones en el Partido Conservador y dar lugar a elecciones especiales en los suburbios de Londres. Johnson acusó a sus oponentes políticos de intentar derrocarlo y dejó abierta la posibilidad de volver a la política. El ex primer ministro británico también fue crítico con su sucesor, Rishi Sunak. La polémica surgió cuando el rey Carlos III otorgó honores a los aliados de Johnson, generando críticas por favoritismo.