La ciudad de Derna en Libia se enfrenta a la desolación tras ser gravemente afectada por inundaciones, con una estimación que supera los 5.100 fallecidos.
Escena desoladora en el corazón de Derna
Las precipitaciones pluviales dejaron a Derna incomunicada desde el domingo, tras desbordamientos que dañaron sus vías principales. La magnitud de la destrucción en el núcleo de la ciudad es palpable.
Equipos especializados rastrean estructuras en ruinas en busca de víctimas, hallando incluso cuerpos llevados mar adentro en el Mediterráneo.
“Por donde mires, te encuentras con víctimas: hombres, mujeres, niños”, compartió Emad al-Falah, operativo humanitario de Bengasi. “Familias completas han desaparecido”.
La tormenta Daniel y sus consecuencias en Libia
Diversas localidades en el oriente libio sufrieron a causa de la tormenta Daniel, pero Derna fue la más castigada. Durante el embate del fenómeno, estructuras hidráulicas aledañas a la ciudad colapsaron, generando inundaciones arrasadoras.
Yann Fridez, líder de la misión del Comité Internacional de la Cruz Roja en Libia, describió la situación: “Derna fue azotada por olas de 7 metros que devastaron todo”. “El costo humano es inmenso”.
La geografía de Derna, ubicada entre el Mediterráneo y montañas pronunciadas, complicó aún más la situación, con solo dos carreteras del sur en condiciones transitables.
Respuesta humanitaria en medio del caos
Equipos de asistencia, con provisiones limitadas, accedieron a la ciudad mediante las rutas montañosas disponibles. A nivel local, se recurrió a recursos previamente disponibles mientras se buscaba restaurar las conexiones vitales.
Los daños en los puentes sobre el Wadi Derna segmentaron el centro urbano, obstaculizando la movilidad y los esfuerzos de auxilio.
Ossama Ali, vocero del Centro de Ambulancias y Emergencias del este de Libia, confirmó más de 5.100 decesos en Derna y aproximadamente cien en otras áreas orientales. Además, se reportaron más de 7.000 heridos siendo atendidos en instalaciones médicas improvisadas.
Cifras y desplazamientos
Se espera que el conteo de fallecidos se incremente, dadas las operaciones de recuperación en curso. Según las estimaciones actuales, cerca de 9.000 individuos siguen sin ser localizados.
Las inundaciones han provocado el desplazamiento de, al menos, 30.000 ciudadanos en Derna, tal como reporta la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU.
A pesar de la devastación, el acceso a Derna sigue siendo un desafío para los organismos de ayuda.
Contexto político y estructural en Libia
La tragedia en Derna ha evidenciado no solo la ferocidad del fenómeno climático, sino también la fragilidad infraestructural de Libia, país que se halla dividido entre administraciones rivales.
“Es un desastre en toda regla”, mencionó un sobreviviente a medios locales, tras perder a múltiples familiares en la catástrofe.
Aunque el testigo no fue identificado, su testimonio es un reflejo del sentimiento general en medio de la tragedia.
Testimonio de supervivientes y estado actual de Derna
El local Ahmed Abdalla, involucrado en las operaciones de rescate, describió el impactante escenario donde cuerpos eran depositados temporalmente en un recinto hospitalario para posteriormente ser sepultados en el cementerio aún en pie en la ciudad de Derna.
Abdalla, comunicándose vía telefónica desde Derna, mencionó: “La situación es indescriptible. Familias completas han perecido en esta tragedia. Algunos fueron llevados por las aguas hasta el océano”.
Equipos de construcción laboraron incesantemente en días recientes para habilitar rutas esenciales, con el fin de facilitar la distribución de auxilio y maquinaria pesada.
Respuesta internacional y acciones de solidaridad
Tras el desastre, Derna, situada a unos 250 kilómetros de Bengasi, recibió asistencia internacional el martes. Las naciones circundantes a Libia, tales como Egipto, Argelia, Túnez, así como Turquía y Emiratos Árabes Unidos, despacharon equipos especializados y provisiones.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, comunicó la intención de su nación de proveer fondos de emergencia a organizaciones de rescate, mientras se coordina con entidades libias y la ONU para otorgar soporte adicional.
Mohammed Abu-Lamousha, representante del Ministerio del Interior en el este libio, reportó, según la agencia estatal, que la cifra de víctimas mortales en Derna supera las 5.300 personas. Además, se han reportado numerosas pérdidas humanas en otras zonas del este del país.
Traslado de víctimas y reflejo de la diversidad en Libia
Muchos cuerpos fueron transferidos a instalaciones mortuorias en localidades cercanas. Más de 300 de los fallecidos, incluyendo 84 egipcios, fueron llevados a la morgue en Tobruk, a 169 kilómetros al este de Derna, según el Centro Médico de esa ciudad.
El perfil de las víctimas resalta cómo Libia, a pesar de su situación política compleja, ha sido un destino laboral para muchos, debido a su industria petrolífera.
Un hecho impactante es que más de 70 de las víctimas de Derna provenían del mismo pueblo, el-Sharif. Funeral masivo en honor a algunos de los fallecidos tuvo lugar en dicho lugar la mañana del miércoles.
Historias personales detrás del desastre
Entre las historias desgarradoras se encuentra la de la familia de Saleh Sariyeh, palestino originario de Ein el-Hilweh en Líbano, que había residido en Derna por años. Saleh, de 60 años, junto con su esposa y dos hijas, encontraron la muerte tras ser arrastrados por la fuerza del agua, según indicó su sobrino Mohammed Sariyeh a AP.
Los cuerpos de los cuatro miembros de la familia Sariyeh fueron sepultados en Derna. Mohammed explicó que, a causa de conflictos en Ein el-Hilweh, la familia no pudo congregarse en Líbano para las condolencias.
El escenario en Derna, a 900 kilómetros de la capital Trípoli, es de especial interés geopolítico debido al control de las fuerzas del comandante Jalifa Hifter, aliado del gobierno oriental libio.
Historia y contexto político de Derna
Gran parte de la infraestructura de Derna se debe a Italia, durante el periodo en que Libia estuvo bajo dominio italiano en el siglo XX. En el pasado, la ciudad fue un epicentro para agrupaciones extremistas, especialmente en los periodos turbulentos post-levantamiento que culminó con la caída del dictador Muamar Gadafi en 2011.