China rebajó el domingo sus lazos diplomáticos con Lituania, expresando un fuerte descontento con el Estado báltico después de que Taiwán abriera una embajada de facto en él, lo que intensificó una disputa que hizo mella en Washington.
Pekín dijo que Lituania ignoraba la “postura solemne” de China y las normas básicas de las relaciones internacionales, y añadió que las relaciones se rebajarían al nivel de encargado de negocios, un rango inferior al de embajador.
La medida “socavó la soberanía y la integridad territorial de China, e interfirió groseramente en los asuntos internos de China”, creando un “mal precedente a nivel internacional”. Instamos a la parte lituana a que corrija sus errores inmediatamente y a que no subestime la firme determinación del pueblo chino y su firme decisión de defender la soberanía nacional y la integridad territorial”, declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores de China.
“No importa lo que haga Taiwán, no puede cambiar el hecho de que es parte de China”, dijo.
Lituania lamentó la decisión de China, pero defendió su derecho a ampliar la cooperación con Taiwán, respetando la política de “una sola China” de Pekín, y dijo que su ministro de Asuntos Exteriores iría a Washington para discutir proyectos de comercio e inversión.