Las disputas en el Golfo deben resolverse pacíficamente a través de conversaciones y todas las partes deben mantener la calma y ejercer moderación, dijo el presidente chino Xi Jinping al primer ministro visitante de Irak el lunes.
Arabia Saudita se está preparando para proporcionar pruebas a la Asamblea General de la ONU, que dice que probará que Irán estuvo detrás de un ataque con aviones no tripulados y misiles el 14 de septiembre contra instalaciones petroleras sauditas, una opinión compartida por Washington. El asalto tuvo inicialmente un impacto drástico en la producción de petróleo saudí.
Riad dice que las armas iraníes fueron lanzadas desde el norte y que está trabajando para identificar la ubicación exacta. Teherán ha negado toda participación y se ha comprometido a tomar represalias incluso contra una respuesta militar limitada.
Al reunirse con el primer ministro iraquí Adel Abdul Mahdi en Pekín, Xi reiteró los anteriores llamamientos de China a la calma, según la televisión estatal china.
“En la actualidad, la situación en la región del Golfo de Oriente Medio es compleja y delicada”, cita el informe de Xi, sin mencionar directamente los ataques a las instalaciones petrolíferas de Arabia Saudí.
“Todas las partes pertinentes deben mantener la calma y actuar con moderación, y resolver adecuadamente sus diferencias de manera pacífica mediante el diálogo y la negociación sobre la base del respeto mutuo, a fin de salvaguardar conjuntamente la paz y la estabilidad regionales”.
China está dispuesta a comunicarse con todas las partes a este respecto, incluido Irak, añadió Xi.
Estados Unidos, aliado de Arabia Saudita, ha desplegado tropas adicionales en la región del Golfo para “disuasión y defensa”, aunque el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo dijo el domingo que Washington pretende evitar la guerra con Irán.
A pesar de ser un actor diplomático relativamente discreto en Oriente Medio, China mantiene estrechas relaciones económicas y energéticas tanto con Arabia Saudita como con Irán, y desde hace mucho tiempo ha tenido que andar con cuidado en sus relaciones con ambos países.
Xi habló con el rey Salman de Arabia Saudita el viernes, condenando el ataque del 14 de septiembre, pidiendo una investigación objetiva y justa y que todas las partes eviten tomar medidas que puedan agravar la situación.
Arabia Saudita es el principal proveedor de petróleo de China para el año hasta la fecha, mientras que Irak, otro miembro de la OPEP, es el cuarto más grande, enviando cerca de 930.000 barriles diarios a China en los primeros siete meses de este año.