La isla de Chipre, en el Mediterráneo, está lista para ayudar en la evacuación de ciudadanos europeos y de terceros países si la guerra en Medio Oriente se intensifica, según informaron autoridades el jueves.
Como el país más oriental de la Unión Europea, Chipre ha servido durante décadas como refugio para miles de personas que escapan de los conflictos en la volátil región.
Recientes informes sugieren que Irán y Hezbolá podrían atacar a Israel en los próximos días o semanas, tras los asesinatos de la semana pasada del jefe militar de Hezbolá, Fuad Shukr, en Beirut, en un ataque israelí, y del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, en Teherán. Irán ha acusado a Israel de la muerte de Haniyeh y ha prometido responder.
“Hemos activado un plan específico, ESTIA, que ha sido probado y es efectivo”, afirmó el portavoz adjunto del gobierno chipriota, Yiannis Antoniou. Añadió que Chipre está listo para recibir a personas evacuadas de la zona de crisis y alojarlas temporalmente antes de su repatriación.
Antoniou informó a Reuters que alrededor de 10 países han consultado sobre el plan, aunque aún no se ha recibido ninguna solicitud formal. De llevarse a cabo una evacuación masiva, esta sería principalmente por vía aérea.
“Contamos con la capacidad y la infraestructura necesarias”, declaró Antoniou, indicando que el Centro de Coordinación de Rescate Conjunto (JRCC) en Larnaca, una ciudad portuaria en el sur de Chipre, será el centro operativo. Este centro, que funciona las 24 horas, se encargará de coordinar las operaciones de búsqueda y rescate.
El jueves, se habían instalado tiendas de campaña en el JRCC, equipadas con catres para procesar a los posibles evacuados.
Chipre ya tuvo un papel fundamental en 2006, cuando sirvió de centro de evacuación para unas 30.000 personas que huían del Líbano durante la guerra entre Israel y Hezbolá.
“Tenemos buenas relaciones históricas con todos nuestros vecinos y queremos aprovechar este papel especial que tenemos. Queremos que Chipre sea un pilar de seguridad y estabilidad, y actúe como un puente de cooperación y paz”, explicó Antoniou.
Desde el 8 de octubre, Hezbolá ha atacado diariamente comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera, alegando que lo hace en apoyo a Gaza en medio de la guerra en esa región. Estos enfrentamientos han causado hasta ahora 25 civiles muertos en Israel, además de 18 soldados y reservistas de las FDI. También ha habido ataques desde Siria, aunque sin heridos.
Por su parte, Hezbolá ha identificado a 401 de sus miembros muertos en los combates actuales, la mayoría en el Líbano y algunos en Siria. En el Líbano, otros 70 miembros de diferentes grupos terroristas, un soldado libanés y decenas de civiles también han muerto.