El gobierno de Donald Trump calificó como “otro fallo corrupto” la reciente decisión de la Corte Internacional de Justicia, emitida el miércoles, en la que el tribunal sostuvo que Israel tiene una obligación legal de permitir a la agencia de refugiados palestinos de la ONU realizar labores humanitarias en Gaza y señaló que la asistencia proporcionada durante la guerra resultó insuficiente.
“Mientras el presidente Trump y el secretario Rubio trabajan incansablemente para llevar la paz a la región, este llamado ‘tribunal’ emite una ‘opinión consultiva’ no vinculante abiertamente politizada que ataca injustamente a Israel y le da a la UNRWA un pase libre para su profundo enredo y apoyo material al terrorismo de Hamás”, dice un comunicado del Departamento de Estado.
“El abuso continuo de esta CIJ de su discreción de opinión consultiva sugiere que no es más que una herramienta política partidista, que puede usarse como arma contra los estadounidenses”, agrega la declaración de Estados Unidos.
