Irán ha recibido la respuesta de Washington a sus propuestas sobre un borrador final de la Unión Europea para la reactivación del acuerdo nuclear de 2015, dijo el miércoles el Ministerio de Asuntos Exteriores de Teherán.
El anuncio se produce un día después de que Washington dijera que Irán había accedido a suavizar las demandas clave que habían frenado la reactivación del acuerdo de 2015, destrozado por el expresidente estadounidense Donald Trump, impulsando las esperanzas de la restauración de un acuerdo que, según sus partidarios, impedirá que Teherán adquiera la capacidad de fabricar armas nucleares.
Esto se produjo un día después de que Teherán criticara a Estados Unidos por lo que dijo que era una respuesta lenta a sus propuestas.
Teherán “ha recibido esta tarde, a través del coordinador [de la UE], la respuesta del gobierno de EE.UU. sobre las opiniones de la República Islámica de Irán acerca de las cuestiones pendientes en las negociaciones para el levantamiento de las sanciones”, dijo el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Nasser Kanaani.
“Se ha iniciado el proceso de revisión minuciosa de las opiniones de EE.UU. y la República Islámica de Irán anunciará su opinión en este contexto al coordinador una vez que haya completado su revisión”, añadió Kanaani, sin dar más detalles.
Irán había enviado la semana pasada sus propuestas sobre el borrador final enviado el 8 de agosto por la UE, que ha coordinado las conversaciones en Viena sobre la reactivación del pacto.
Poco después del anuncio de Teherán, Washington confirmó que había respondido a las propuestas de Irán.
“Como saben, hemos recibido los comentarios de Irán sobre el texto final propuesto por la UE a través de ésta”, dijo el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
“Nuestra revisión de esos comentarios ya ha concluido. Hoy hemos respondido a la UE”.
Según un funcionario estadounidense anónimo, el borrador de Irán no incluye su demanda de larga data de que Estados Unidos levante la designación de terrorismo del Cuerpo de Guardias Revolucionarias de Irán y que el Organismo Internacional de Energía Atómica cierre su investigación sobre rastros inexplicables de uranio en tres sitios no declarados.
El acuerdo de 2015 entre Irán y seis potencias mundiales -Gran Bretaña, China, Francia, Alemania, Rusia y EE.UU.- otorgaba a la República Islámica un alivio de las sanciones a cambio de restricciones a su programa nuclear.
El acuerdo, conocido formalmente como Plan de Acción Integral Conjunto, o JCPOA, fue diseñado para evitar que Irán desarrolle un arma nuclear, algo que el país ha negado que esté persiguiendo.
El anuncio de Irán se produce en un momento en que su archienemigo Israel ha presionado a los países occidentales para que detengan las conversaciones sobre la reactivación del acuerdo, advirtiendo de las consecuencias de volver a él.
“Ahora mismo está sobre la mesa un mal acuerdo. Daría a Irán 100.000 millones de dólares al año”, dijo el primer ministro Yair Lapid a los periodistas el miércoles.
El ex primer ministro Benjamín Netanyahu también expresó su firme oposición al acuerdo el miércoles, diciendo que el nuevo acuerdo emergente es aún peor que antes.
“El terrible acuerdo con Irán… arroja una pesada sombra sobre nuestra seguridad y nuestro futuro”, dijo Netanyahu a los periodistas en Tel Aviv.
Irán ha negado cualquier intención nefasta y afirma que su programa nuclear está diseñado para fines pacíficos, aunque recientemente ha estado enriqueciendo uranio a niveles que los líderes internacionales dicen que no tienen ningún uso civil.