Los presidentes de Egipto y Jordania criticaron a Israel durante una cumbre de emergencia de estados árabes e islámicos celebrada en Doha. La reunión se convocó después de un ataque aéreo israelí contra terroristas líderes de Hamás en Qatar. Ambos mandatarios señalaron que las acciones israelíes bloquean la posibilidad de nuevos acuerdos de paz en la región y ponen en riesgo los ya firmados.
El presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sissi, declaró que Israel cruzó “todas las líneas rojas” en su ataque a Doha. Añadió que “la conducta de Israel ha traspasado todos los límites, y la condenamos con la mayor firmeza”. También afirmó: “El caos israelí exige una acción conjunta para proteger nuestros intereses”, en referencia a la necesidad de una respuesta coordinada entre los países presentes.
Sissi sostuvo que la situación “obstaculiza el futuro de la paz, amenaza su seguridad y la seguridad de los pueblos de la región y añade obstáculos a las posibilidades de nuevos acuerdos de paz e incluso aborta los existentes”. Recordó que Egipto mantiene vínculos con Israel desde hace 45 años, aunque de forma intermitente y con episodios de tensión.
El rey Abdullah II de Jordania, cuyo país firmó un acuerdo de paz con Israel hace tres décadas, señaló en la cumbre que “el ataque en Qatar es una prueba de que la amenaza israelí no tiene límites y nuestra respuesta debe ser clara y disuasoria”. En su discurso, pidió a los estados árabes e islámicos que adopten medidas concretas y “revisen todas las herramientas de acción conjunta” para enfrentar la situación.