El Papa León afirma que los conflictos en Oriente Medio se desatan con una “intensidad diabólica” sin precedentes y aboga por un mayor respeto al derecho internacional, en declaraciones dirigidas a obispos católicos y agencias de ayuda que operan en la región.
Durante una reunión en el Vaticano, el pontífice sostiene que los países de la región están siendo “devastados por guerras, saqueados por intereses particulares y cubiertos por una nube de odio que hace el aire irrespirable y tóxico”.
“Hoy, la guerra violento parece desatarse… con una intensidad diabólica hasta ahora desconocida”, afirma, y añade que la situación humanitaria en el enclave palestino de Gaza es “trágica e inhumana”.
León, elegido el 8 de mayo para suceder al muerto Papa Francisco, instó el mes pasado a Israel a permitir la entrada de más ayuda humanitaria a Gaza. Hoy, en sus declaraciones, no menciona a Israel directamente.
El Papa, nacido en Estados Unidos, tampoco hace referencia explícita a la reciente guerra de 12 días entre Israel e Irán, en la que Estados Unidos bombardeó instalaciones nucleares iraníes, pero exhorta a los países a mostrar un mayor respeto por el derecho internacional.
“Es verdaderamente angustiante ver que el principio de ‘la fuerza hace el derecho’ predomina en tantas situaciones hoy, todo con el fin de legitimar la búsqueda del interés propio”, declara.
“Resulta preocupante observar que la fuerza del derecho internacional y del derecho humanitario parece no ser ya vinculante, reemplazada por el supuesto derecho a coaccionar a otros”, añade León.