El Parlamento de Moldavia aprobó una declaración en la que condena la “invasión no provocada a gran escala” de Ucrania por parte de Rusia.
“Desde 2014, Rusia ha estado librando una guerra agresiva no provocada e injustificada contra Ucrania, que desde 2022 se ha convertido en una guerra a gran escala. La declaración subraya que las acciones de Rusia son crímenes de guerra y una flagrante violación de los principios del derecho internacional. Se hace un llamamiento a la Federación Rusa para que detenga la guerra y retire sus fuerzas del territorio de Ucrania hasta las fronteras internacionalmente reconocidas”, reza la declaración.
El 1 de marzo, el Bloque de Comunistas y Socialistas presentó un proyecto de declaración “sobre las garantías del mantenimiento de la paz en Moldavia”, y el diputado comunista Vladimir Voronin propuso crear una comisión para elaborar un texto común de la declaración. En respuesta, el presidente del Parlamento moldavo instó a los diputados del Bloque de Comunistas y Socialistas a “decidirse a llamar a las cosas por su nombre”. Tras ello, los diputados de la facción abandonaron desafiantes el Parlamento, y solo votaron los miembros de la mayoría parlamentaria.
Anteriormente, el primer ministro moldavo, Dorin Rechan, declaró que Rusia no dispondría de recursos suficientes para invadir Moldavia, y que a Transnistria le interesaba mantener la paz y la seguridad en la región.